Carne de olvido

Con la discreción que caracteriza a tan minoritaria, puede que selecta, pero minoritaria cadena, La 2 ha estrenado el concurso diario (de lunes a viernes, 19.00 horas) Código Final. El marrón de presentarlo le ha caído a Goyo Jiménez (Melilla, 1970) y el arranque no ha podido ser peor: un mísero 1,8 de audiencia. O sea, Nada. Parafraseando a José Mota y a su mítico gag, cabría decir aquí que, “si no es por no estrenarlo. Si hay que estrenarlo se estrena, pero estrenarlo por estrenarlo es una tontería”. Pues, eso. Hoy en día, los concursos de toda la vida están en peligro de extinción. Sobrevive porque es una pieza de museo el Saber y ganar del inmortal Jordi Hurtado. El resto comienzan a ser ya clásicos y están en otro tono, mezclando la cultura con el entretenimiento puro y duro: La ruleta de la fortuna (a la hora de comer); y Pasapalabra, Ahora caigo y Boom! en la misma franja del neófito programa de Goyo Jiménez, al que solo cabe desearle una muerte, televisivamente hablando, lo más digna posible. Eso sí, al menos lo intento, pero el viento sopla en contra.