Las prioridades

La casualidad, si me permiten la ironía, nos hizo conocer el pasado sábado por la portada de SEGRE que “Educación descarta el instituto de Cappont que los padres exigen”. Y digo casualidad porque ERC ha esperado a que pasaran las elecciones para dejar de dar largas a los padres; ahora les dice que no. Durante un tiempo fueron los convergentes los que se negaban cuando ERC votaba que sí. Los terrenos siguen disponibles. La pertinencia del instituto nadie la niega. Pero en plenas casualidades postelectorales, el Govern argumenta que hay plazas vacantes en otros lugares y también que hay razones económicas. Los padres argumentan lo que es obvio, esto es, tener a niños de doce años caminando hasta el campus escolar no es lo mejor para las familias que viven en un barrio que ha crecido exponencialmente. Lo de la necesidad o no en política siempre es discutible. Todo es una cuestión de prioridades. Lo paradójico es que ciertas formaciones explican sus prioridades tras las elecciones.

Y como algunos nos queremos seguir dedicando a realizar política útil, la semana en que anunciaban el no al instituto de Cappont, nos cogía presentando en el Parlament una propuesta que conseguimos aprobar por unanimidad para aumentar las plantillas del Hospital Nadal Meroles de Lleida, un centro sociosanitario. Se trata de un centro que atiende a pacientes de alta complejidad y con unos resultados excelentes gracias a la profesionalidad y buen hacer de sus trabajadores. Allí atienden a pacientes que van desde la larga estancia, la convalecencia media, paliativos, subagudos, integración asistencial y un largo etcétera. Y por eso hay que atender las solicitudes que desde el centro alertan de sobrecarga laboral. Para tener mejores servicios es necesario dimensionar mejor la presión asistencial. Eso también es una cuestión de prioridades. En mi opinión, todos los esfuerzos posibles serán buenos para contribuir a mejorar la salud de los leridanos. Todavía no hemos conseguido arrancar el compromiso de construir el instituto de Cappont, pero insistiremos en todo lo que sea mejorar. Como el tiempo y los recursos son finitos, cada uno debería explicar con claridad cuáles son sus prioridades y darlas a conocer antes de las votaciones, no después.