El lugar de la mujer

Hoy es el Día Internacional de la Mujer, y sin duda La candidata perfecta es la propuesta más evidente en cartel con mayores elementos para mostrar una situación en torno a la mujer y sus derechos. La realizadora de Arabia Saudí, que ya mostró una realidad de su país en torno a la intolerancia y a las restricciones que promueve una intransigencia manifiesta con La bicicleta verde, ahora nos ofrece un reflejo sencillo pero concreto sobre el estado de las cosas, sobre el papel de la mujer en países con tradiciones y hábitos que cada vez son más refutados por ellas mismas, en una lucha del día a día por la igualdad.

Una competente doctora que debe controlarse ante un machismo sin sentido y que advierte que poco o nulo caso se hace a las necesidades de la gente, optará por presentarse a la alcaldía de su localidad abriendo un frente valiente y decidido y dispuesta a cambiar las cosas. Ella pertenece a una familia de músicos, con hermanas que la apoyan en lo posible y un padre que desde una gira con su orquesta será consciente del problema que ello supone en una casa donde el recuerdo de la madre ya fallecida está muy presente.

Al-Mansour no carga excesivamente las tintas, pero coloca a una heroína anónima que no se arruga, y lo hace sin forzar el dramatismo, incluso apelando al factor afectivo, pero deja muy claro que las cosas están cambiando, que el tiempo en que las mujeres son solo una sombra se cuestiona ya con fuerza por parte de quien no quiere ser con justicia menos que un hombre.

Y esa aplastante realidad está presente aquí no en un cine de mujeres, sino en mujeres que hacen cine. Porque la igualdad comienza por no encasillar a nada, ni a nadie.