SEGRE

Creado:

Actualizado:

El candidato del PP a la reelección como presidente del gobierno, Mariano Rajoy, está más cerca de lograr este objetivo en breve, tras casi 310 días sin ejecutivo y después de dos elecciones, y no lo conseguirá por haber negociado su programa electoral para sumar los apoyos que requiere (recordemos que en junio logró 137 escaños, por tanto lejos de los 176 que suponen la mayoría absoluta) sino que ayer el Partido Socialista Obrero Español se lo puso en bandeja al acordar su comité federal abstenerse en la segunda votación de la sesión de investidura, desoyendo así a las bases y con algunos líderes territoriales que aún mantienen su voto contrario a Rajoy. El PSOE tenía un papel difícil en este calvario y sangría de votos que han supuesto las dos elecciones generales en menos de un año. Podía optar por mantenerse en el no acordado en diciembre, lo que comportaba ir a unos terceros comicios en una situación más que delicada que incluso le ha costado el cargo a su secretario general, o bien la abstención, con lo que se aleja de sus principios de la izquierda histórica y facilita el acceso al poder a su máximo adversario. Cualquiera de las dos decisiones habría pasado factura y el acuerdo de ayer deja muchos frentes abiertos y grandes incógnitas por solventar. Así, los socialistas catalanes, con Miquel Iceta al frente, pueden seguir dando guerra todavía, puesto que mañana decidirán si acatan la decisión del comité federal o bien, como todo apunta, se mantienen en su postura contraria; la dirigente socialista balear Francina Armengol ha insinuado que votará en contra; y el hasta hace tres semanas líder socialista Pedro Sánchez, que no acudió al cónclave de ayer, hizo uso de las redes sociales para advertir que “pronto” la militancia recuperará a “su PSOE alejado del PP”. Mucho tendrá que trabajar el principal partido de la oposición para recomponerse porque las heridas son hondas y aún pueden empeorar si la decisión de la gestora (de abstenerse, no ausentarse del congreso ni votar en contra) no se acata en la sesión de investidura de esta semana. Y con todas estas aguas revueltas, quien está sacando más ganancias es el Partido Popular y en especial su líder Mariano Rajoy que, sin apenas mover un dedo y sin que los escandalosos casos de corrupción en los que se ha visto involucrado el PP le hayan salpicado, ve cómo gana escaños en cada nueva contienda electoral.

tracking