Fábrica de independentistas

Primero se acuñó la frase de forma irónica asegurando que Rajoy era el mejor propagandista del independentismo, pero a medida que pasan los días la historia se va repitiendo como farsa, y esperemos que no sea como tragedia según el modelo marxista, pero lo cierto es que cuando se atisban esperanzas de diálogo siempre llega alguna decisión de Madrid que nos devuelve a la dura realidad de la crispación y el enfrentamiento. Sucedió con Aznar con la recogida de firmas contra el Estatut, se avanzó con los recortes del Estatut y el rechazo a las propuestas de Mas, pero ya en las últimas semanas, desde el PP se han encargado de alimentar el procés: antes del 1-O taparon los posibles errores del Parlament en la tramitación de leyes con la irrupción en sedes de la Generalitat y la detención de cargos institucionales para intentar dificultar el referéndum. Luego convirtieron el 1-O que habían despreciado y que aseguraron que no existía en una represión sin precedentes en la historia democrática de España y llevaron la cuestión a las primeras planas de la prensa internacional, negando la evidencia de centenares de heridos. Y para rematar su faena, de momento, retiran el pasaporte al jefe de los Mossos, una de las personas mejor valoradas en Catalunya tras los atentados de agosto, y encarcelan a dos dirigentes de la sociedad civil con una figura de prisión preventiva que se aplica excepcionalmente cuando hay riesgo de fuga o de eliminación de pruebas y admitiendo que se decreta porque colaboran “en la ejecución de la hoja de ruta diseñada para llegar a la independencia de Catalunya”, aunque la tipifican como sedición por alentar a los ciudadanos que intentaban impedir la operación de la Guardia Civil en la conselleria de Economia. La orden de prisión, dictada por la jueza pero con petición fiscal y apoyo gubernamental, no se sostiene jurídicamente porque hay pruebas de que los dos encarcelados fueron quienes hicieron llamamientos para evitar más disturbios, lo que eliminaría la sedición, políticamente es una torpeza porque han decretado prisión por unas ideas que tienen amparo constitucional y estratégicamente es una equivocación porque lejos de debilitar el procés, lo fortalece con más ánimos y nuevos mártires y además complica las posibilidades de diálogo. Pero lo peor es que en Madrid están convencidos de haber actuado correctamente y esto es anuncio de que perseverarán en el error.