Un complejo de vanguardia

Hace cinco años, el 30 de octubre de 2014, el Consell Interuniversitari de Catalunya aprobaba que la Universitat de Lleida pudiera impartir desde el curso siguiente la titulación de Veterinaria, una vieja reivindicación que había chocado siempre con trabas de todo tipo, pese a que Lleida y sus comarcas son la primera provincia en producción ganadera sin poder ofrecer estos estudios a los alumnos y a las empresas del sector. Se aprobó una doble titulación de Veterinaria y Ciencia y Producción Animal y solo faltaba el compromiso para construir un hospital veterinario, imprescindible para las prácticas de los futuros profesionales, y aquí jugó un papel determinante la Diputación, con su entonces presidente Joan Reñé al frente, que ofreció los terrenos de la institución en Torrelameu y se comprometió a encabezar la financiación. Ayer se inauguraba la nueva unidad quirúrgica docente de Veterinaria con unas instalaciones modélicas, financiada por la Diputación, que incluye aulas, área de consulta, zona de diagnóstico por la imagen para resonancias, TAC y ecografia, dos quirófanos para animales domésticos y otro para grandes con zona de postoperatorio y la posibilidad de que los alumnos puedan seguir las operaciones por streaming. Como dijo el presidente de la Generalitat, son unas instalaciones de “Champions” y es de justicia, ahora que se inauguran, reconocer los méritos de quienes las impulsaron desde el primer momento, de quienes creyeron frente a viento y marea en su viabilidad y también en quienes se comprometieron a financiarlas con el expresidente de la Diputación Joan Reñé y el rector de la UdL, Roberto Fernández, como principales impulsores y valedores del proyecto que ya es realidad. Los futuros veterinarios ya pueden disfrutar y aprovechar las nuevas instalaciones para formarse y para investigar y también hay que destacar que Torrelameu se ha convertido en un centro de vanguardia de la investigación biomédica y veterinaria al concentrar en su término junto al nuevo hospital, el Centre de Recerca Experimental Biomèdica Aplicada (CREBA) y el Centre d’Estudis Porcins, también auspiciados por la Diputación y que ya han formado a casi seiscientos profesionales sanitarios convirtiéndose en uno de los centros de investigación biomédica con cerdos más importante de Europa. Es un sueño hecho realidad que debe acompasar el liderazgo ganadero con el de la investigación y formación del sector.