El sueño olímpico del Pirineo

La Generalitat ha dado el primer paso para solicitar oficialmente la organización de los Juegos Olímpicos de Invierno para 2030 con una carta al presidente del Comité Olímpico Español en la que concreta la posible candidatura Pirineus-Barcelona. De momento, es una precandidatura porque primero tendrá que superar las diferencias entre sus promotores, JxCat y ERC votaron en diferente sentido la semana pasada, después de ir de la mano de la “cohesión social y territorial y la sostenibilidad”, puestas como condiciones por el president Aragonès para formalizar la candidatura, conseguir a continuación el respaldo del COE, que puede complicarse porque Aragón se siente agraviado por su exclusión de una candidatura pirenaica, y finalmente superar candidaturas como las de Salt Lake City o Sapporo entre otras. Pero es un primer paso que responde a un viejo sueño olímpico de las comarcas del Pirineo como una oportunidad de mejorar sus infraestructuras, captar inversiones y promocionarse turísticamente en todo el mundo, aunque de momento no se conoce el proyecto y solo se sabe que dará mucho protagonismo a Barcelona y sus estaciones más próximas, sin que se haya concretado el papel reservado a las comarcas de Lleida más allá de unas declaraciones a SEGRE del anterior secretario del Deporte, Gerard Figueras, en que explicaba que Beret acogería el snowboard y el freestyle; el Pallars o l’Alta Ribagorça, el esquí de montaña, si lo hubiera, y Espot, el telemark.

Habría que concretar y reclamar para las pistas de Lleida pruebas de nivel y no centrarlo todo en torno al área de Barcelona si quieren lanzar una candidatura pirenaica. Y también habrá que definir el ámbito de la consulta previa sobre los Juegos a la que se han comprometido y que la CUP, que está en contra de los Juegos, limita a la ciudadanía de las comarcas pirenaicas, Val d’Aran, Alta Ribagorça, los Pallars, Alt Urgell, Cerdanya, Bergadà y Ripollès. Los precedentes son peligrosos porque en casi todas las sedes que hicieron votación previa ganó el no: Múnich, Calgary, Innsbruck, Cracovia, Hamburgo y hasta Oslo, donde después rectificó el gobierno.

Se ha empezado a caminar y habrá que exigir más concreciones sobre el apoyo real y el equilibrio territorial antes de soñar con los Juegos del Pirineo.Ruptura consumadaComo era previsible, los tres socios que firmaron el pacto para gobernar la Paeria han consumado la ruptura con la marcha del Comú del equipo de gobierno. Era la única salida posible a la vista de las diferencias expresadas que culminaron con la destitución de Talamonte como teniente de alcalde. Se mantienen los ejes del acuerdo programático y ERC y JxCat tienen suficiente mayoría para aplicarlo.