De 'Panem et circenses'

No somos tan distintos a los antiguos romanos, de hecho somos bastante parecidos, tecnologías aparte. La expresión latina “Panem et circenses” (literalmente, pan y circo) que acuñaron en la antigua Roma para referirse a la práctica de un gobierno que, para mantener tranquila a la población u ocultar hechos controvertidos, provee a las masas de alimento y entretenimiento, es el fútbol nuestro de cada día. Hace unos días el Barça comunicaba a bombo y platillo que en una encuesta –claro está elaborada y ‘cocinada’ por el propio club– los socios blaugranas le daban un notable a la gestión de la junta directiva. Qué importa, pues, si se han hecho bien o mal negociaciones de fichajes, o si el club desde hace unos años está en los juzgados, o si gracias por encima de todo a Messi se siguen logrando títulos, pese a perder un estilo y, eso sí, viendo como el Real Madrid gana Champions año sí y año también. Pero se han ganado Ligas y Copas y eso, ¡ay amigo!, lo arregla todo.

Qué importa si La Liga se lleva partidos a Estados Unidos despreciando absolutamente al socio. La pela es la pela. Y qué importa, en definitiva, si un jugador como Isco, crecido de soberbia por estar al amparo de un club como el Real Madrid, se niega a responder a un periodista porque no le gusta lo que explica de él. Luego se golea a la subcampeona del mundo, Croacia, y aquí paz y después gloria.

Son ejemplos y casos distintos, pero todos llevan a la misma encrucijada. Lo mismo se podría decir de cualquier equipo. ¿Quién se acuerda ahora de si el Lleida Esportiu debe a Hacienda? El equipo marcha como un tiro de bien. El socio y el simple aficionado quieren olvidar las penas de su dura semana de trabajo con la satisfacción de ver a su equipo ganar. Le sirve para tener tema de conversación ante amigos y compañeros y también para sacar pecho como si de un éxito personal se tratase.

Por mucho que Nerón incendiase Roma y que Calígula cometiera atrocidades mil, no había nada mejor para la pobre población plebeya romana que ver un buen espectáculo de gladiadores. Como ahora.