Colau recurre a la cuestión de confianza tras el rechazo a sus cuentas

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, vinculó ayer la aprobación de los Presupuestos municipales a una cuestión de confianza, después de que la oposición en bloque los haya rechazado en el último pleno del año, con 15 votos a favor -del Gobierno de BComú y PSC- y 26 en contra. La ciudad necesita unos Presupuestos, “y la única opción que queda es la cuestión de confianza”, aseguró Colau, que afeó a ERC y la CUP que no apoyen su propuesta presupuestaria pero sí la de la Generalitat, porque considera que se adapta mejor a sus modelos. Vincular esta aprobación a la cuestión de confianza abre el plazo de un mes para que la oposición acuerde una propuesta de alcalde y Presupuesto alternativos y, si no lo logra, que es lo más probable porque es imposible que ERC pacte con PP o C’s, cuando termine este mes se aprobarán automáticamente las cuentas, de 2.580 millones de euros. Colau dijo que es lógico no alcanzar acuerdos presupuestarios con CiU por sus discrepancias en el modelo, pero que le genera perplejidad como alcaldesa y ciudadana no poder hacerlo con ERC y la CUP, “y más cuando pueden hacer acuerdos al otro lado de la plaza, donde gobierna la derecha catalana y cuando no se ponen de acuerdo en la fiscalidad”, dijo en referencia a la Generalitat. Los presidentes de los dos grupos de izquierda en la oposición, Alfred Bosch (ERC) y María José Lecha (CUP), explicaron su rechazo a los presupuestos en la falta de confianza en el gobierno de Colau por haber “incumplido” los acuerdos a los que ha ido llegando con ambas fuerzas y no reflejarlos en el presupuesto. La presidenta del grupo de C’s, Carina Mejías, aseguró que las cuentas son “antidemocráticas” y que anteponen intereses personales a los temas de interés.