Las protestas no pueden con el Gobierno rumano

El gobierno socialdemócrata de Rumanía rechaza dimitir tras revocar un decreto que despenaliza ciertos casos de corrupción. A las peticiones populares de dimisión se une la moción de censura promovida por la oposición de centroderecha, que no prosperará debido a que el Gobierno cuenta con mayoría parlamentaria.

“El Gobierno no tiene por qué dimitir. Ha sido elegido legítimamente y tiene que continuar gobernando”, asegura el líder del Partido Socialdemócrata (PSD), Liviu Dragnea. El primer ministro, sin embargo, no descarta cesar al ministro de justicia.

El decreto, aprobado el pasado martes, despenalizaba los delitos de corrupción que le supusieran al estado pérdidas menores a 44.000 euros. Esto ha desatado la mayor movilización social desde la caída del comunismo.