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La Fiscalía ordena precintar los colegios a los Mossos y estos lo ven peligroso

La policía catalana identifica a responsables de institutos, CAP y locales municipales

El alcalde de Bell-lloc, Carles Palau, ayer en su despacho en el ayuntamiento.

El alcalde de Bell-lloc, Carles Palau, ayer en su despacho en el ayuntamiento.JOAN GÓMEZ

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La Fiscalía Superior de Catalunya ordenó ayer a los Mossos d’Esquadra precintar colegios electorales del referéndum antes del sábado e impedir que se pueda votar. Por su parte, los Mossos consideran que este dispositivo puede acarrear problemas de orden público y daños más importantes que los que se quieren evitar con este tipo de medidas.

La Fiscalía Superior de Catalunya ordenó ayer a los Mossos d’Esquadra precintar, antes del sábado, los colegios electorales del referéndum e impedir que se pueda votar en la calle, en un “radio de seguridad” de 100 metros alrededor de esos centros. Pide garantizar que no se pueda acceder a los locales donde está previsto que se acojan urnas y que se evite la constitución de mesas electorales mediante un “amplio dispositivo” policial. Por su parte, los Mossos ven con preocupación la instrucción de la Fiscalía, por considerar que ese dispositivo podría acarrear problemas de orden público. En la reunión de la cúpula de la policía catalana se puso de relieve, según fuentes de este cuerpo, que la instrucción podría acabar acarreando daños más importantes de los que se pretenden evitar con este tipo de medidas.

En este sentido, la orden de la Fiscalía establece que los Mossos “podrán requerir el auxilio y colaboración de las policías locales” y, de no ser ésta suficiente, apoyo a los efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. Asimismo, reclama que el sellado de los centros sea “inviolable” y que se cuelgue un cartel advirtiendo de la “responsabilidad penal” en caso de que se rompa, y precisa que se deberá desalojar e identificar a las personas que hubiera en el lugar y confiscar el material vinculado a la votación, “especialmente urnas, equipos informáticos, papeletas y documentación o propaganda electoral”. El ministerio público exige a los Mossos vigilar los precintos hasta las 21.00 horas del 1 de octubre. Según fuentes vinculadas a la convocatoria del referéndum, en Catalunya habría 4.800 colegios electorales, de los cuales entre 250 y 300 estarían en Lleida.

Por otra parte, agentes de los Mossos se desplazaron ayer por orden de la Fiscalía hasta decenas de localidades leridanas para identificar a los responsables de los locales municipales, institutos, escuelas, centros de atención primaria y de trabajo donde se prevé que se pueda votar, les preguntaron si habían recibido material para la votación y les advirtieron de las posibles consecuencias legales de colaborar con la convocatoria. Además, agentes de paisano de la Guardia Civil se personaron en otros quince ayuntamientos leridanos para que los secretarios municipales les entregaran una copia del “decreto” firmado por los alcaldes donde apoyan el 1-O. Fueron los de El Palau, Bellvís, Linyola, Golmés, Fondarella, Tremp, Juneda, Les Borges, Sort, Almenar, Alcarràs, Rosselló, Torrefarrera, Torregrossa y Bell-lloc.

Algunas entidades proponen movilizaciones para defender el derecho a voto como pernoctar en colegios electorales, aunque cargos de la ANC pidieron calma y no precipitarse, mientras que la Assemblea Pagesa invitó a aparcar tractores en los alrededores de los puntos de votación (ver página 6).

No habrá detenciones de alcaldes antes del 1-O La Fiscalía de Lleida precisó ayer que no habrá detenciones de alcaldes que no se presenten a declarar sobre su apoyo y colaboración con el referéndum antes del 1-O. Fuentes judiciales explicaron que estudiarán más adelante cómo actuar ante casos como el del primer edil de Bell-lloc, Carles Palau, que volvió a ser citado a declarar para ayer y volvió a plantar al fiscal tras no acudir el jueves de la semana pasada. Palau aseguró que “a través de una conversación telefónica les reiteré mi posición de que no quería ir a declarar”, “que no era una cuestión de agenda, sino que no quería ir voluntariamente” y que “el apoyo de los vecinos, la ley del referéndum y el ataque brutal que recibieron las instituciones catalanas refuerzan mi posición”. Por su parte, los otros dos alcaldes que tampoco se presentaron la semana pasada, los de Seròs, Gabriel Pena, y Alcarràs, Miquel Serra, recibieron ayer personalmente por parte de dos agentes de la Guardia Civil una nueva citación para acudir a declarar esta mañana a las 10.00 y 11.00 horas, respectivamente, aunque avanzaron que tampoco se presentarán.

El alcalde de Bell-lloc, Carles Palau, ayer en su despacho en el ayuntamiento.

El alcalde de Bell-lloc, Carles Palau, ayer en su despacho en el ayuntamiento.JOAN GÓMEZ

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