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El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ayer, en la valla fronteriza entre Ceuta y Marruecos.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ayer, en la valla fronteriza entre Ceuta y Marruecos.EFE

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La crisis migratoria derivada del incremento en la llegada de migrantes a España por vía marítima desde el norte de África se consolidó ayer como arma arrojadiza entre el Gobierno y las formaciones de la oposición, después de que el domingo el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, abriera la veda y afirmara, sin ambajes, que España “no puede dar papeles a todos” ni tampoco “absorver a los millones de africanos” que quieren establecerse en Europa.

Así las cosas, la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, calificó de “impresentable” las palabras de Casado. “No es razonable su posicionamiento, salvo que quieran sumarse a las tendencias de otros políticos de países europeos”, subrayó la ministra, en referencia a las tesis defendidas en esta cuestión por el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini.

En la misma línea, la secretaria de Estado de Migraciones, Consuelo Rumí, criticó al líder de los populares por abrazar un discurso “alarmista” y “de confrontación”, lo que es, a su entender, una “irresponsabilidad política”. En sintonía con el Ejecutivo socialista, el secretario de Sociedad Civil de Podemos, Rafael Mayoral, acusó a Casado de utilizar la crisis migratoria para “desviar el foco” de la precariedad generalizada a la que las políticas de su formación han llevado a las clases populares.

También desde Compromís, su coportavoz Mónica Oltra, tachó al dirigente popular de “extremista” y le comparó con Salvini y con el presidente estadounidense, Donald Trump. En respuesta a las críticas, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, matizó que los migrantes son “las víctimas” de las mafias “culpables” que trafican con ellos. No obstante, acusó al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, de ser el “responsable” de la situación de colapso en el sur de la península. Sin embargo, el número 1 de los populares catalanes, Xavier García-Albiol, insistió en las declaraciones del domingo de Casado y advirtió de que “la política buenista de puertas abiertas generará un conflicto muy serio en España”.

También el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, urgió ayer a poner fin a la política del “buenismo” y a las “ocurrencias” de Sánchez con el fenómeno de la migración. En una visita a la valla fronteriza de Ceuta, por la que la semana pasada accedieron a la ciudad autónoma más de 600 personas, el líder naranja defendió que “si queremos una Europa libre de fronteras internas necesitamos controlar las fronteras externas”, a la vez que criticó a los socialistas por crear un “efecto llamada” con sus “comités de marketing político”.

Sánchez presiona a la UE para que ejecute los 35 millones consignados para reforzar la frontera alauí

Ante esta situación, que ayer dio una tregua con sólo 26 personas rescatadas en el Estrecho, el Gobierno central ha solicitado “ayuda de emergencia adicional” a la Unión Europea, tal y como confirmó la portavoz comunitaria Natasha Bertaud. En este sentido, el Ejecutivo de Sánchez ha presionado a las instituciones de los Veintiocho para que se ejecuten ya los 35 millones de euros comprometidos para mejorar el control de la frontera con Marruecos. A este respecto, el ministro de Exteriores, el leridano Josep Borrell, se reunió ayer con su homólogo alauí, Nasser Bourita, y aseguró que el país comandado por Mohamed VI no ha estado provocando deliberadamente el incremento del flujo de migrantes.

Por otro lado, el Gobierno central ha comprometido 3,4 millones de euros para habilitar las dos naves cedidas por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras para acoger a los migrantes que vayan llegando, y aliviar la saturación de otros centros. Así, se reformará el espacio para proporcionarles una acogida digna Está previsto que los primeros usuarios de esta infraestructura ingresen en ella mañana.

Los centros de acogida a los recién llegados, desbordados

En lo que va de 2018, más de 22.500 personas han alcanzado las costas españolas a bordo de 1.200 pateras, según los datos publicados ayer por Salvamento Marítimo. Asimismo, 3.825 migrantes han sido interceptados por Marruecos y devueltos a África, y se tiene constancia de la desaparición o fallecimiento de otros 153. Sólo este fin de semana, cerca de 1.500 personas fueron rescatadas por Salvamento Marítimo, lo que ha comportado el colapso de los ya sobrecargados centros de acogida para los recién llegados. A este respecto, más de 1.800 migrantes han sido ubicados, provisionalmente, en pabellones de las localidades gaditanas de Algeciras, Los Barrios, Barbate, Jerez y San Roque, además de la propia Cádiz.

Por otro lado, el Gobierno central ha comprometido 3,4 millones de euros para habilitar las dos naves cedidas por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras para acoger a los migrantes que vayan llegando, y aliviar la saturación de otros centros. Así, se reformará el espacio para proporcionarles una acogida digna Está previsto que los primeros usuarios de esta infraestructura ingresen en ella mañana. 

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