La crisis del sector del taxi vivió ayer un nuevo capítulo con pocos avances. El sector consideró insuficientes las ofertas del ministerio de Fomento y la protesta de los profesionales contra la proliferación de vehículo de alquiler con conductor (VTC) que estalló la semana pasada en Barcelona se extiende por todo el Estado.
El ministerio ofertó en la reunión celebrada ayer en Madrid la aprobación el 14 de septiembre un real decreto para establecer un coche VTC por cada 30 licencias de taxi, según explicó Alberto Álvarez, portavoz de Elite Taxi, la organización mayoritaria del sector en Barcelona. Los profesionales del sector quieren que haya un compromiso de que todas las comunidades autónomas asumirán el ratio y que los ayuntamientos puedan dar licencias específicas a los VTC. Las organizaciones de taxistas ven buena voluntad del Gobierno central pero quieren concreción y más teniendo en cuenta que el ministerio prevé reunirse hoy con las empresas de vehículos con conductor y mañana con las comunidades.
El secretario de Estado de Infraestructuras y Transportes del Ministerio, Pedro Saura, por su parte, dijo que Fomento está abierto a que los ayuntamientos tengan competencia para articular y conceder licencias urbanas a las empresas de vehículos de alquiler con conductor, como Uber y Cabify, un instrumento con el que podrían así limitar la expansión de estas empresas en relación con el taxi. Saura no detalló las medidas que puede incluir la normativa que promete el ministerio para asegurar la ratio de un coche VTC por cada 30 licencias de taxi. No obstante, el presidente de Antaxi, Julio Sanz, apuntó a la posibilidad de que se puedan “inhabilitar o dejar en suspenso” licencias de VTC si en el momento de la renovación que tienen que pasar cada dos años la cuota de uno por treinta está sobrepasada.
En este contexto, Unauto, la patronal de empresas de vehículo de alquiler con conductor, denuncia el “chantaje” que los taxistas están realizando a toda la sociedad con el fin de “mantener su monopolio y no permitir competencia” a su negocio.
La huelga de taxistas capitaneada por Barcelona se ha extendido a todas las grandes ciudades, con colapso del sector, por ejemplo, en Madrid, Valencia o Bilbao, entre otras.
Por su parte, los comercios situados en las zonas afectadas por la huelga de taxistas en Barcelona han experimentado una caída del 25% en la afluencia de sus clientes respecto a un día habitual hasta las 16.00 horas de este lunes, según informó ayer en un comunicado RetailCat.