Sánchez reitera su apuesta por el diálogo con Catalunya, pero sin gestos ni concesiones

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, instó ayer a los independentistas a pasar del “monólogo al diálogo” y les volvió a recordar que no tienen la mayoría social en Catalunya. Sánchez hizo estas afirmaciones en Barcelona, donde el PSOE dio inicio a la precampaña para las elecciones municipales, autonómicas y europeas del próximo 26 de mayo con la presentación del candidato del PSC a la Alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni. Sánchez también insistió en la duración de su legislatura. Garantizó que seguirá en el cargo “pase lo que pase, hasta 2020”.

Para Sánchez, las personas son el objetivo central del proyecto de ley de presupuestos generales al situarlas, especialmente las más vulnerables, en el centro de la acción política. Por eso, pidió a los partidos soberanistas que los apoyen en la tramitación parlamentaria que comienza mañana, porque “van a permitir que España y Catalunya avancen”.

El líder de los populares afirma que las cuentas son un “pago vergonzoso a soberanistas y batasunos”

En esta misma línea habló el líder del PSC, Miquel Iceta, afirmando que es “imposible” que los partidos soberanistas y que “dicen gobernar” en Catalunya no den un sí a los presupuestos generales. Iceta asegura que estas cuentas estatales favorecerán a la Generalitat y a la ciudadanía catalana con más recursos y un trato más justo. El socialista catalán agradeció a Sánchez que “persista” en el diálogo con el Govern y calificó de “trifachito” el acuerdo entre PP, Ciudadanos y Vox en Andalucía.

En su intervención, el candidato del PSC a la alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni, pidió que Barcelona no se constituya como la capital “de una república imaginaria”, porque su proyecto de alcaldía va enfocado a un gobierno “para todos” y no solo “para los suyos”, en alusión a los partidarios de la república catalana. Asimismo, también se comprometió a “dar la batalla” en las elecciones de mayo.

Sánchez lanzó una reflexión a ambas formaciones asegurando que la derecha sufrió mucho tras la sentencia de la Gürtel. Para él, esto supone una “bancarrota ética” para el PP.

De este modo, el secretario general de los socialistas argumentó que la derecha ha sumado a su “bancarrota moral” una “bancarrota ideológica”.

En especial, rechazó la “banalización de la violencia de género” que se produjo durante las negociaciones para la formación del nuevo gobierno andaluz. En este sentido llamó a la movilización, porque “la lucha por mantener las conquistas sociales no termina nunca”, y aseguró que el PSOE “siempre estará con las mujeres”.

tortosa

El secretario de organización del PDeCAT, Ferran Bel, descartó ayer que las inversiones para Catalunya en los presupuestos sean un “gesto”, sino que solo “cumplen” con el Estatut, y reclamó al Gobierno central una “solución política”, sin haber decidido aún sobre enmiendas a la totalidad. En esta misma postura se posicionó ayer el president del Parlament, Roger Torrent, quien aseguró que ERC no aprobará presupuestos hasta que no hayan movimientos por parte de la Moncloa.

Según Bel y Torrent, ambas formaciones tomarán decisiones coordinadas ante los presupuestos, a pesar de que cada grupo parlamentario mantenga su soberanía. Torrent subrayó que aunque los presupuestos no salgan adelante, “no debe porque caer el Gobierno de Sánchez”. El president del Parlament recordó que que su partido apoyó la moción de censura porque situó Sánchez a la Moncloa, pero insistió en que ahora, “si no hay movimientos”, no apoyarán a las cuentas estatales. Asimismo, sobre la condición de aprobar las cuentas catalanas con el apoyo a las estatales, Bel lo rechazó tajante. “Esto no es un intercambio de cromos”, insistió en referencia a la propuesta del PSC y los comuns.

Por otra parte, la Juventut Nacionalista Catalana (JNC) se mostró favorable a la propuesta del PDeCAT, partido del que forma parte, exigiendo que Sánchez deje que Catalunya ejerza su “derecho a decidir”.

barcelona

La presidenta de Cs en Catalunya, Inés Arrimadas, afeó ayer al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que negocie con los partidos independentistas para conseguir la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) en el Congreso. Además, aseguró que “son unos presupuestos ‘fake’, son un engaño. Suben los impuestos, no se los cree nadie y están pensados únicamente para contentar al separatismo”, declaró, insistiendo en que el único interés de Sánchez con los presupuestos es permanecer en el Gobierno.

El presidente del PP, Pablo Casado, insistió ayer en sus críticas al proyecto de presupuestos, que considera “sectarios e ideológicos”: “Es la factura librada a la moción de censura, el pago vergonzante a independentistas, populistas y batasunos del alquiler del Palacio de la Moncloa, el Falcon y el helicóptero”. También advirtió que votar menos al PP y más a otras fuerzas políticas en España ha supuesto “más nacionalismo” y “más confrontación y división en las calles”.