El PSOE extremeño apoya una moción del PP que pide un 155 “duradero” en Catalunya

La Asamblea de Extremadura aprobó el jueves a última hora una moción presentada por el Partido Popular para pedir al Gobierno central que vuelva a intervenir la Generalitat por la vía del 155. La resolución, que salió adelante con el apoyo del PSOE y de Ciudadanos, insta a La Moncloa a tomar el control de las instituciones catalanas “de manera firme” y con “la amplitud y duración que sea necesaria”. Asimismo, populares, socialistas y Ciudadanos mostraron su rechazo a la “bilateralidad” entre Madrid y el Govern de Quim Torra porque, a su entender, supone un agravio para el resto de comunidades autónomas. Además, exigieron que el castellano se convierta en la lengua vehicular y común en las escuelas de todo el Estado. Por otra parte, el texto también mostró “el apoyo del pueblo extremeño” a que el Estado se haga con el control de TV3 “para garantizar que realmente sea un servicio público neutral y al servicio de todos los catalanes”.

Mientras tanto, la portavoz del Ejecutivo central, Isabel Celáa, sostuvo ayer que no se dan las condiciones en Catalunya para volver a intervenir el autogobierno. En este sentido, insistió en que sería “inconstitucional”. Igualmente, Celáa quiso quitar hierro a la moción de PP, PSOE y Cs en la Cámara extremeña, y puntualizó que “lo que vino a decir Extremadura es que, si llegara a quebrarse la ley y el marco constitucional, sería el momento de pensar en el 155”.

No obstante, el posicionamiento de los socialistas extremeños no gustó en las filas del PSC. A este respecto, el primer secretario de la formación, Miquel Iceta, indicó que “no me gustaría que el Parlament de Catalunya aprobara una moción que le dijera a Extremadura lo que tiene que hacer”. Asimismo, reiteró que la Generalitat cumple con la legalidad y que no procede aplicar un nuevo 155. En la misma línea, el diputado del PSC en el Congreso José Zaragoza calificó de “poco elegante” la petición de Extremadura de volver a intervenir las instituciones de Catalunya.

BARCELONA

El Parlament inició ayer los trabajos de la ponencia para reformar el reglamento de la Cámara y permitir las investiduras telemáticas, lo que facilitaría un eventual nombramiento de Carles Puigdemont como president de la Generalitat sin requerir su presencia física en el hemiciclo. Los grupos volverán a reunirse el 1 de febrero para plantear propuestas concretas sobre la reforma de la norma básica del legislativo catalán.

En otro orden de cosas, el recurso del vicepresident cesado, Oriol Junqueras, contra su prisión provisional ha causado división en el seno del Tribunal Constitucional, según publicó ayer El Independiente. En este sentido, algunos magistrados han pedido al ponente de la resolución que reconsidere su decisión de mantener a Junqueras entre rejas a la vista de la nueva jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

La portavoz del Govern, Elsa Artadi, insistió ayer en que la mesa de partidos para favorecer el diálogo, que acordaron impulsar el jueves la Generalitat y el Ejecutivo central a fin de avanzar en la “solución política” del conflicto catalán, debe contar con la presencia del PSOE y de Podemos. De este modo, Artadi replicó el posicionamiento de la vicepresidenta del Gobierno central, Carmen Calvo, que aseguró que en este espacio de diálogo sólo estarían presentes los partidos catalanes. “La mesa de partidos catalanes ya existe y no la duplicaremos”, advirtió Artadi.

Por otra parte, el vicepresident de la Generalitat, Pere Aragonès, también contestó a Calvo, que había asegurado que la mesa de partidos actuaría dentro del marco del Estatut. A este respecto, el también adjunto a la presidencia de ERC avisó de que la salida que necesita el conflicto en Catalunya “va más allá del Estatut”.

En otro orden de cosas, el ministro de Exteriores, el leridano Josep Borrell, dio entender ayer que ha enviado instrucciones a todos los representantes diplomáticos de España en el extranjero para que “repliquen” a los líderes soberanistas que internacionalizan el proceso independentista catalán.