Uber y Cabify dejan hoy Barcelona por las restricciones para los VTC

Las empresas Uber y Cabify confirmaron ayer que dejarán de operar en Barcelona a partir de hoy, cuando entra en vigor el decreto de la Generalitat que, a su juicio, les “expulsa” y les obliga a precontratar los vehículos de alquiler con conductor (VTC) con una antelación mínima de 15 minutos, como reclamaba el sector del taxi. Esta antelación puede ser ampliada por los ayuntamientos catalanes. Según las compañías, esta norma pone en riesgo 3.000 puestos de trabajo. De hecho, el Vector Ronda, que da servicio a Cabify, anunció el miércoles 1.000 despidos.

Coincidiendo con este anuncio, el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, subrayó en una comparecencia en el Congreso que la norma que transfiere las competencias a las comunidades autónomas en materia de VTC “no es una ofensiva a las plataformas digitales” como Cabify o Uber, sino que “da libertad pero no obliga” a las autonomías a regular esta actividad. De esta forma, rechazó que el Ejecutivo central se haya desentendido de la problemática entre taxis y VTC. Por otro lado y tras las culpas que PP y Cs le echaron por ser el impulsor del decreto vigente sobre la regulación de estos vehíuclos, Ábalos se limitó a devolverles la pelota y echar la culpa a los populares. También insistió en que los partidos aporten “ideas y no ocurrencias de propaganda política”.

Mientras tanto, el sector del taxi en Madrid, en huelga indefinida desde hace 11 días, avanzó que volverán a poner encima de la mesa una nueva propuesta, en la que renuncian a incluir un tiempo mínimo para la precontratación del servicio de VTC, el principal escollo en las negociaciones. Aunque mantienen en el documento las limitaciones a la captación de clientes y el regreso a base de estos vehículos tras el servicio. Además reclaman “voluntad política” a la Comunidad de Madrid tras el rechazo de su propuesta a, que el presidente Ángel Garrido calificó de “aún más radical que las anteriores”. Desde el PP en el Ayuntamiento de Madrid insisten en que su partido no aplicará las políticas de Catalunya, mientras que la Comunidad de Madrid califica de “muy mala noticia” el anuncio de Cabify y Uber aunque lo ve “lógico” si se legisla “en contra” de ellas.