Ciudadanos cede ante las exigencias de Vox y Díaz Ayuso presidirá la Comunidad de Madrid

La popular Isabel Díaz Ayuso será la presidenta de la Comunidad de Madrid. Después de más de dos meses de negociaciones y de la celebración de una sesión de investidura en la que el presidente de la Asamblea de Madrid, Juan Trinidad, de Ciudadanos, no propuso a ningún candidato para liderar el Ejecutivo regional por falta de apoyos, el partido naranja se plegó a las exigencias plasmadas en el “documento definitivo” presentado ayer por Vox. En este sentido, portavoz de Ciudadanos en el Parlamento regional, Ignacio Aguado, explicó que asumen las condiciones de los ultraderechistas porque no son “incompatibles” con el acuerdo previo que habían cerrado con el Partido Popular. En la misma línea, la propia Díaz Ayuso se felicitó porque “todo” lo que propone Vox en su documento es “perfectamente asumible” para el PP. A este respecto, el texto presentado por la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, rebaja las exigencias de los ultras en relación con la derogación de las leyes LGTBI. Sin embargo, respecto de la violencia de género, mantiene que “cualquier tipo de acoso, discriminación o violencia será tratado de la misma forma, evitando que diferentes víctimas de acoso tengan diferentes grados de protección”. También contempla la creación de una consejería para fomentar la natalidad y que se garantice que los cuerpos de seguridad acceden a toda la información de la Administración regional sobre los migrantes irregulares.

Así las cosas, Díaz Ayuso vaticinó que en unos días se plasmará el acuerdo a tres que permitirá su investidura, para la que todavía no hay fecha.

Vox rebaja su pretensión de acabar con las leyes LGTBI pero iguala la violencia de género con todas las otras

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El presidente del Gobierno central en funciones, Pedro Sánchez, aseguró que “en absoluto” está intentando presionar a Unidas Podemos con la ronda de contactos con representantes de los colectivos sociales que está llevando a cabo. Sin embargo, lamentó que se está perdiendo “un tiempo precioso” y apeló a la “responsabilidad y generosidad” de todos los partidos para desencallar la investidura y evitar la repetición de las elecciones. Sánchez indicó, además, que la fórmula que prefiere es la de un “Gobierno progresista” a la portuguesa. “Vamos a elaborar un programa abierto, con un componente progresista”, remarcó, que presentarán a todas las formaciones, no únicamente a Unidas Podemos.

Con todo, la vicepresidenta del Gabinete socialista en funciones, Carmen Calvo, admitió que existen “muchas discrepancias” con Unidas Podemos en algunas materias, como la agenda feminista. Mientras tanto, el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, negó que los socialistas piensen ya en una nueva convocatoria electoral. “Es una película”, zanjó.

En paralelo, el grupo parlamentario de Cs en el Congreso ha solicitado la comparecencia de todos los ministros en sus respectivas comisiones para que expliquen qué han hecho desde las elecciones generales.