Los vigilantes de seguridad del aeropuerto de El Prat decidieron ayer mantener la convocatoria de huelga indefinida a partir de mañana después del fracaso de la reunión de mediación que mantuvieron ayer con la empresa Trablisa, adjudicataria del servicio, en la sede de la conselleria de Trabajo. Juan Carlos Giménez, asesor del comité de huelga, lamentó que el acuerdo con la compañía haya sido “imposible” y denunció que Trablisa “no tiene intención de llegar a ningún acuerdo favorable con los trabajadores”. “Todos son balones fuera, el acuerdo que nos ofrecen es mínimo y no cumple con nada de lo que pedimos”, explicó Giménez. Mientras tanto, Pilar Albacete, directora de recursos humanos de Trablisa, criticó que el comité de huelga se haya “enrocado” en la cuestión económica, a la vez que les pidió valorar los “esfuerzos” que está efectuando la empresa para cerrar un acuerdo y poner fin al conflicto.
En otro orden de cosas, Ryanair ha amenazado con cerrar la base operativa de Girona, además de la de Tenerife Sur y Las Palmas, tras la suspensión de la producción del avión Boeing 737 MAX por problemas de seguridad, según advirtieron ayer los sindicatos Sictpla y USO.
