SUCESOS VIOLENCIA
Violencia doméstica tras la muerte de una pareja en Barbastro en 2018
Ocurrió en diciembre y la Guardia Civil ha probado que el hombre se suicidó tras matar a su esposa || Fue militar y había estado destinado en Lleida
El Gobierno aragonés se concentró el jueves para mostrar su repulsa al crimen en Andorra (Teruel).
Después de ocho meses de investigaciones, la Guardia Civil ha determinado que la muerte de un matrimonio de octogenarios cuyos cuerpos aparecieron a mediados de diciembre en el interior de una vivienda de la localidad oscense de Barbastro fue un crimen machista. Así lo anunció ayer el cuerpo armado, que culmina de esta forma una “compleja investigación” que ha sacado a la luz que el hombre, Felipe Moreno, de 87 años, mató primero a su esposa, Lidia Salinas, de 83 años. Después, se suicidó. Los cadáveres fueron hallados el 16 de diciembre y la última vez que se les vio con vida fue dos días antes.
El que a la postre ha sido señalado como autor de este crimen machista, Felipe Moreno, fue teniente coronel del Ejército de Tierra en el cuartel de Barbastro, según informó Heraldo de Aragón. Después, estuvo destinado en Lleida.
Por otra parte, Gema, la mujer de 39 años que fue apuñalada por su pareja, Mustafá de 41 años, en la localidad turolense de Andorra el miércoles continúa ingresada en estado grave, pero estable, en la UCI del Hospital Miguel Servet de Zaragoza, con importantes heridas en la cabeza. El agresor, con el que había mantenido el día antes de los hechos una fuerte discusión que había acarreado que se marchara de la casa con Ismael, el hijo menor de ambos, se arrojó desde un cuarto piso y murió poco después en el Hospital de Alcañiz. El suceso también se cobró la vida de Ismael, de 16 años, que, según ha revelado la autopsia, recibió varios hachazos al intentar proteger a su madre, así como heridas por arma blanca. El cuerpo presentaba heridas defensivas en los brazos, tal y como avanzó ayer Heraldo de Aragón. “La muerte de un adolescente que perdió la vida intentando salvar la de su madre es el símbolo dramático de la lucha que debemos librar sin cuartel contra este mal, el machismo criminal. Queremos que la muerte de Ismael no sea en balde y nos refuerce en el compromiso de todos para acabar con esta lacra”, manifestó ayer la portavoz del Gobierno en funciones, Isabel Celaá, al término de la reunión del Consejo de Ministros.
