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Buscan a un hombre arrastrado por el agua en una acequia en Alicante

La gota fría remite en el sureste pero ahora se ceba con el centro peninsular

Las calles de Arganda del Rey, en Madrid, convertidas en ríos, ayer.

Las calles de Arganda del Rey, en Madrid, convertidas en ríos, ayer.EFE

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Los servicios de emergencia buscaban anoche a la que podría ser la séptima víctima mortal de la extraordinaria gota fría que ha devastado en los últimos días el sureste peninsular. Se trata de un ciudadano neerlandés de 66 años que, a pesar de las advertencias de las autoridades por las inundaciones, salió a pasear con familiares y amigos. El hombre cayó en una acequia del término de la localidad alicantina de Dolores. La fuerza del agua lo arrastró y ya no pudo salir. Efectivos de la Guardia Civil lo buscaban en una zona amplia entre los pueblos de Dolores, San Fulgencio y Daya Nueva, todos de la comarca de la Vega Baja. En paralelo, el episodio adverso comenzó a remitir, pero mantenía bajo aviso amarillo a 14 provincias del centro (ver desglose). Aun así todavía obligó a efectuar varios desalojos en un camping de Crevillent y en otro de Guardamar, ambos en Alicante. El president valenciano, Ximo Puig, avisó que hay que extremar la prudencia porque, aunque ha dejado de llover, el riesgo sigue en las crecidas del río Segura.

Arganda del Rey, epicentro otra vez de las lluvias torrenciales Arganda del Rey volvió a ser ayer una de las localidades más afectadas por los intensos chubascos que, como coletazos finales de la gota fría, afectaron al centro peninsular. Y es que, cuando han pasado solo unas semanas del episodio que dejó importantes destrozos en esta localidad madrileña, ayer el agua se abrió paso de nuevo por la población y obligó a cortar momentáneamente una línea del metro. En esta localidad, varios coches han sido arrastrados por la fuerza del agua. A pesar de los destrozos, que se suman a los sufridos el 26 de agosto, no se tuvieron que lamentar daños personales.

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