La ola de protestas en Bagdad registra otos 23 muertos

Un ataque armado contra manifestantes pacíficos en la capital iraquí, que dejó el viernes al menos 23 muertos según el último recuento de víctimas, no impidió que volviesen ayer a las calles para seguir exigiendo mejores condiciones de vida y la reforma de un sistema político ineficiente y corrupto.

Una fuente del ministerio de Interior iraquí dijo que el número de fallecidos aumentó a 23 en las pasadas horas y los heridos alcanzaron los 135, después de que el viernes por la noche hombres armados abrieran fuego contra los manifestantes en la plaza Al Jalani, en el centro de Bagdad y próxima al epicentro de las protestas, la plaza Tahrir.

Los hombres armados viajaban en vehículos todoterreno y dispararon contra los manifestantes, pero todavía se desconoce su afiliación, aunque activistas señalaron en las redes sociales que podrían pertenecer a grupos o milicias chiíes.

Por otra parte, un cohete lanzado desde un dron impactó ayer en la residencia del líder chií iraquí Muqtada al Sadr, según informaron diputados de su partido, Saeroon, aunque causó tan solo daños materiales en la vivienda. Al Sadr respalda las protestas sociuales que han sacudido el país en las últimas semanas.