Tres Ponts y la C-28 copan las inversiones, con otros 8 millones “no territorializables”
El proyecto de presupuestos de la Generalitat que aprobó ayer el Executiu prevé una inversión de más de 110 millones en Lleida, un 77% más que las últimas cuentas aprobadas por el Govern. Las mayores partidas son para el túnel de Tres Ponts, la C-28, depuradoras en el Segrià, el canal Segarra-Garrigues y la línea de tren de La Pobla.
La Generalitat prevé invertir en Lleida este 2020 más de 110 millones de euros, un dato que corresponde a las actuaciones que son directamente atribuibles a las comarcas del llano y del Pirineo. Esta cifra supone un aumento del 77% respecto a los últimos presupuestos que el Govern aprobó en 2017, cuando la inversión en la demarcación era de 62 millones. Asimismo, a los 110 millones se le tienen que añadir al menos 8,4 millones calificados como “no territorializables”, que se dividen entre conservación de carreteras (2,8 millones), medidas correctoras del impacto ambiental del canal Segarra-Garrigues (3,4 millones) y la concentración parcelaria de esta infraestructura de riego (2,2 millones). El presupuesto también contempla varias partidas para la línea de tren de La Pobla que ascienden a más de 6,4 millones.
La mayoría de las inversiones previstas en los presupuestos de la Generalitat, que el Executiu aprobó ayer, corresponden a inversiones que ya están en curso en Lleida. La partida de mayor cuantía, 10,6 millones, corresponde a las obras del túnel de Tres Ponts, en la C-14 entre Organyà y Montant de Tost. Asimismo, 5,2 millones se destinarán a la mejora de la curva del Tonyon en el puerto de la Bonaigua (C-28), mientras que las depuradoras de Torrefarrera y Torre-serona y la de Vilanova de Segrià cuentan con dos partidas que suman más de 9 millones.
La comarca con mayor inversión es el Segrià, con 38 millones. La Generalitat destinará también 4,3 millones a la construcción de la planta de tratamiento de residuos del vertedero de Montoliu de Lleida. Al Segrià le sigue el Alt Urgell con 20,8 millones, donde además del túnel de Tres Ponts el Govern invertirá 4,3 millones en el CAP de La Seu. Las cuentas contemplan también partidas para construir los archivos de Les Garrigues y la Alta Ribagorça. También prevé dedicar 2,2 millones a la modernización del Canal de Pinyana. Del mismo modo, contempla una partida de 117.000 euros para ampliar el bloque quirúrgico del Hospital Arnau de Vilanova y hasta 2023 prevén invertir más de 12 millones en estas obras.
El proyecto de presupuestos de la Generalitat supone que el gasto corriente se sitúa en 25.113 millones de euros, lo que representa 3.000 millones más que en 2017. Mientras, la inversión se ha aumentado en 415 millones y llega a los 2.003 millones de euros. Asimismo, el objetivo de los presupuestos es conseguir un nivel de déficit cero y la Generalitat destinará 880 millones a pagar interesos de la deuda. El vicepresidente y conseller de Economía y Hacienda, Pere Aragonès, entregó ayer el proyecto de presupuestos al presidente del Parlament, Roger Torrent, y posteriormente presentó las principales cifras en comisión. El trámite parlamentario de las cuentas del Govern se alargará durante unos dos meses, según informaron fuentes de la conselleria de Economía.
Uno de los principales ejes de estas cuentas es el aumento del gasto social. En este sentido, el Executiu destinará 890 millones más que en 2017 a la Salud, 1.047 más en Educación, 330 millones en programas de protección social y 193 en el fomento de la ocupación. Asimismo, las cuentas prevén 30 millones de euros para el plan de obras del Govern (PUOSC). En materia de ingresos, prevé un incremento de 172,6 millones procedentes de la reforma fiscal pactada con los Comuns. Estos ingresos proceden de la reforma de impuestos como el IRPF o el de sucesiones. Además, se ha creado una nueva tasa que gravará la incidencia sobre el medio ambiente de las instalaciones de producción, almacenamiento, transformación y transporte de energía, telefonía y telemática.