Iceta insta al Govern a no renunciar a los "avances concretos" del documento de Sánchez

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha instado a no renunciar a los "avances concretos" que incluye el documento de 44 propuestas del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, en beneficio de un "futuro incierto". En una entrevista en Catalunya Ràdio, Iceta ha asegurado que el gobierno español tiene la voluntad de reformar el Código Penal "cuanto antes mejor" a pesar de calcular que no será en menos de 8 meses. "Si hay un cambio legal que puede beneficiar a una persona ya condenada efectivamente contribuye a resolver el problema aunque la sentencia sea firme", ha añadido en referencia a los políticos condenados.

En referencia a la voluntad del presidente de la Generalitat, Quim Torra, de consultar a los partidos independentistas sobre el contenido de la reunión con Sánchez, Iceta ha considerado que también podría consultar a los políticos no independentistas que, según ha añadido, son mayoría y se podría fijar así una "posición de país".

Con respecto al documento que Sánchez ha entregado a Torra sobre "avances concretos", Iceta ha instado al ejecutivo catalán a abordar estas cuestiones porque "los problemas más concretos que afectan a la vida cotidiana tienen más posibilidades de ser resueltos". "Que la espera del día que todo lo arreglará no nos prive de hacer el trabajo en el terreno del concreto de las cosas que pueden ayudar a que la gente viva mejor", ha concluido.

Sobre las garantías del diálogo que pide Torra, el líder de los socialistas catalanes ha respondido de que "las garantías que se pueden tener en un diálogo son que lo que se siegue a hablar tenga palabra y que se haga el esfuerzo por acercar posiciones".

Iceta asegura que en el diálogo entre gobiernos no habrá mediación internacional y ha descartado una amnistía al considerar que sería una 'tabula zanja' de todas las decisiones judiciales. "Es tanto como decir que no pasó nada", ha añadido.

En referencia a la reforma del Código Penal, Iceta lo ha calificado de "necesario" y ha argumentado que los delitos de sedición y rebelión no se ajustan lo suficiente a lo que pasó en el otoño de 2017.