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Un militar tailandés asesina al menos a veinte personas

Se atrincheró en un centro comercial con una decena de rehenes || Unos 30 heridos y se desconocen los motivos de la masacre

Imagen de los alrededores del centro comercial sitiado.

Imagen de los alrededores del centro comercial sitiado.NARONG SANGNAK/EFE

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Al menos 20 personas fallecieron ayer y otras 30 resultaron heridas ayer cuando un soldado disparó de manera indiscriminada en un centro comercial de la ciudad de Nakhon Ratchasima, en el este de Tailandia, según el ministerio de Defensa.

El sospechoso, identificado como Jakrapanth Thomma, se encontraba anoche, al cierre de esta edición, atrincherado en el recinto comercial con al menos una decena de personas como rehenes.

El agresor, un militar de bajo rango, ha retransmitido en directo la matanza

Los equipos de asalto del Ejército rodearon el centro comercial y las autoridades cortaron calles, estableciendo un perímetro de seguridad de dos kilómetros alrededor de recinto para tratar de capturar al asaltante. La Policía también llevó hasta el lugar a la madre del asaltante con el objetivo de lograr que se entregue a las autoridades.

Según la reconstrucción preliminar de los hechos, a primeras horas de la tarde el asaltante disparó a su comandante y otros compañeros en una base militar a las afueras de la ciudad, para después robar armas y munición y darse a la fuga en un coche con el que se dirigió al centro de la urbe, que se encuentra a unos 250 kilómetros al noreste de Bangkok.

El militar, quien publicó fotografías y vídeos del ataque en las redes sociales, condujo hasta el recinto comercial donde al salir del coche comenzó a disparar con un rifle de asalto contra viandantes y automóviles. Acto seguido, el soldado se adentró en el edificio donde continuó con los disparos, mientras centenares de personas huían despavoridas.

“No puedo levantar el dedo”, decía el tailandés, ataviado con uniforme militar y que también aseguró sentirse “cansado” y hablar de “rendirse”, en varias publicaciones colgadas en su perfil de Facebook, que más tarde sería desactivado.

La policía evitó por el momento pronunciarse sobre el posible motivo del crimen, aunque el supuesto asaltante fue publicando varios mensajes políticos y de venganza contra el Ejército tailandés en las redes sociales.

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