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© Coches quemados en Kenosha tras los disturbios antirracistas.
EUROPA PRESSEl presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, defendió ayer la actuación del menor que acabó la semana pasada con la vida de dos manifestantes antirracistas en la ciudad de Kenosha, en el estado de Wisconsin. Kyle Rittenhouse, de 17 años, irrumpió armado en una protesta contra la violencia policial en el caso de Jacob Blake. Al verse acorralado, abrió fuego a su alrededor y mató a dos personas. Hirió, además, a una tercera. “Han visto el mismo vídeo que yo, y él estaba tratando de escaparse de los manifestantes supongo, y se cayó y le atacaron muy violentamente. Probablemente lo hubieran matado”, manifestó Trump horas antes de visitar Kenosha, a pesar de que las autoridades locales le pidieron que no lo hiciera.
Al hilo de esto, el mandatario estadounidense calificó de “tonto” y “estúpido” al alcalde la localidad, el demócrata John Antaramian. “Anoche los anarquistas radicales intentaron irrumpir en la casa del alcalde, y muchas cosas malas le están pasando a este pobre tonto. Es un alcalde muy estúpido”, señaló Trump. Por otra parte, dijo no saber si se reunirá con los familiares del ciudadano afroamericano Jacob Blake, que sigue en el hospital.
