RELIGIÓN DIÁLOGO
El papa reza por la paz en la zona iraquí conquistada en Estado Islámico
Visita histórica al norte del país, antiguo bastión de Estado Islámico || Reclama resistir la tentación de la venganza
El papa FRancisco oficiando a misa en la catedral de Qaraqosh, destruida por Estado Islámico.
El Papa instó ayer a “resistir la tentación de buscar venganza” en su último encuentro con los cristianos de Irak durante la misa que ha presidido en el Estadio ‘Franso Hariri’ de Erbil. Los cristianos en Irak son una minoría que, como los yazidíes, ha sido brutalmente perseguida en un país donde el 60% es musulmán chíi. Francisco invitó a construir una Iglesia y una sociedad “abiertas a todos y solícitas” hacia los más necesitados. Asimismo, instó a “resistir a la tentación de buscar venganza”, que hunde en una “espiral de represalias sin fin”.
Tras presidir un acto de oración por las víctimas de la guerra en Mosul y trasladarse en helicóptero hasta Qaraqosh, considerada la ciudad cristiana más grande de Iraq, en la llanura de Nínive, el Papa viajó a Erbil, última etapa del viaje antes de volver a Roma desde el aeropuerto de Bagdad. Francisco se desplazó en un jeep descubierto por primera vez desde que llegó a Irak.
Francisco reclama en la zona kurda reconquistada “que las mujeres sean respetadas y defendidas”
En Qaraqosh ofició una misa en la catedral de esta localidad del norte iraquí, en un símbolo de esperanza y renacimiento para la diezmada comunidad cristiana del país. La más grande iglesia sirio-catolica en el país, quemada, destruida, profanada por los yihadistas del Estado Islámico (EI) escuchó entre sus muros al papa clamar para que “las mujeres sean respetadas y defendidas”.
Anteriormente, en la plaza de Hosh al-Bieaa (de las cuatro iglesias) en Mosul, liberada en 2017 tras ser durante tres años el gran bastión de Estado Islámico, Francisco afirmó que “la paz es más fuerte que la guerra”, cuya acción definió como una “tempestad tan deshumana”.
En octubre de 2016 -y con apoyo aéreo de Estados Unidos y sus aliados- las tropas iraquíes iniciaron una campaña militar para liberar la ciudad. Al combate también se unieron combatientes kurdos, tribus árabe-sunitas y militantes chiitas. La ciudad de Mosul fue finalmente liberada en 2017.
