Los presos del 1-O salen en libertad sin renunciar a la amnistía y el referéndum

Los nueve dirigentes independentistas encarcelados por el 1-O quedaron ayer en libertad después de que se hicieran efectivos los indultos aprobados el martes por el Consejo de Ministros. Todos abandonaron la prisión sin renunciar a nada y reclamaron una ley de amnistía para acabar con la “represión” y culminar el proceso de independencia.

Oriol Junqueras, Jordi Turull, Raül Romeva, Dolors Bassa, Carme Forcadell, Josep Rull, Joaquim Forn, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart salieron ayer en libertad de las prisiones de Lledoners, Wad-Ras y Puig de les Basses después de que se hicieran efectivos los indultos aprobados el martes por el Gobierno español. A primera hora de la mañana, el BOE publicó los reales decretos de concesión de esta medida de gracia y, después, el Tribunal Supremo ordenó la excarcelación de estos nueve dirigentes independentistas, a los que había condenado a penas de cárcel de entre 9 y 13 años por el 1-O.

En apenas una hora y media, completaron los trámites en los centros penitenciarios, y alrededor de las doce del mediodía estaban ya todos en libertad.. La primera en salir fue Carme Forcadell, expresidenta del Parlament, que señaló que los indultos son “una pequeña victoria”. Bajo la lluvia, a las puertas de Wad-Ras, también tuvo un recuerdo para sus compañeras de prisión e instó a lograr “la gran victoria” de la amnistía y la autodeterminación.

Seguidamente, mientras en Lledoners los presos hombres se daban un baño de masas y trataban de llegar al escenario instalado fuera de esta prisión para hacer los parlamentos, en Puig de les Basses, Dolors Bassa, que fue consellera de Trabajo, advertía que con los indultos “no acaba nada”. Los siete líderes del 1-O que estaban encerrados en Lledoners coincidieron en que salen en libertad “con las convicciones más fuertes que nunca”.

Oriol Junqueras, presidente de ERC, dijo que “la independencia es la libertad” y Jordi Sànchez, exlíder de la ANC, avisó de que no aceptarán “ningún silencio a cambio de un indulto”. Jordi Turull, que fue conseller de Presidencia, añadió que, a diferencia de los indultos, su compromiso con la independencia “no es ni parcial ni revisable”.

Los presos exhibieron una imagen de unidad y todos reclamaron la amnistía y la república catalana

Por otra parte, Juan Carlos Campo, ministro de Justicia, admitió que, a última hora, aumentaron a 6 años el período en que puede ser revertido el indulto concedido a Junqueras frente a los 4 iniciales.En paralelo, la sesión de control al Ejecutivo de Pedro Sánchez en el Congreso se convirtió en un cruce de reproches entre Moncloa y oposición. El propio Sánchez, que tendrá con el president, Pere Aragonès, la primera reunión el martes por la tarde, defendió la “valentía” de su decisión mientras el líder del PP, Pablo Casado, exigió que dimita. Sánchez y Aragonès habían acordado reunirse en Moncloa a lo largo del mes de junio para retomar la negociación entre sus respectivos gobiernos, antes de reanudar los trabajos de la mesa de diálogo que se constituyó en febrero de 2020 y que solo pudo celebrar una primera y única reunión.

Además, Oriol Junqueras, Jordi Turull y Raül Romeva deberán hacer frente a las cantidades que fijará el Tribunal de Cuentas por su “responsabilidad contable” en el presunto desvío de fondos para las “embajadas catalanas” y el Diplocat.

Retomar el diálogo como objetivoEl conflicto catalán entra en una nueva fase que tiene como primer hito la reactivación de la mesa de diálogo entre Catalunya y España. Pero fuentes del Gobierno español dijeron ayer que, antes de convocarla, Esquerra y JxCat han de ponerse de acuerdo en qué plantear. Todo mientras está pendiente la reforma del delito de sedición.