Lleida y Huesca piden regular ya el acceso a Mont-rebei y limitar la navegación en Canelles

Los alcaldes del entorno del congosto de Mont-rebei (Àger y Viacamp) y los consells de la Noguera y la Ribagorza aragonesa exigieron ayer a los gobiernos de ambas comunidades autónomas regular el acceso al desfiladero de Mont-rebei para evitar el colapso de las entradas a este espacio natural que cada año recibe alrededor de 200.000 visitantes. Los dos consells firmaron ayer un convenio de colaboración para promover el camino natural entre Montfalcó y el camino de Corçà por el desfiladero, a través de la pasarela colgante que une las poblaciones de Viacamp y Àger. Este convenio tiene una vigencia de 4 años y establece además las condiciones para el mantenimiento y conservación de la pasarela peatonal para garantizar su funcionalidad y seguridad de los visitantes. El coste anual será de 4.000 euros que aportarán las dos comarcas. Las obras de mejora que se han llevado a cabo para mejorar la infraestructura han sido financiadas a partes iguales por las dos comarcas con 55.000 euros cada una con ayudas de las diputaciones de Lleida y Huesca.

Por su parte, el alcalde de Àger, Lluis Ardiaca, aseguró que su municipio es el que más sufre la presión de los turistas al tener dos de los accesos navegables del desfiladero. Asimismo, lamentó la falta de regulación para las embarcaciones “más allá de una simple matrícula”, lo que provoca que en días punta haya hasta 100 kayaks y barcas en el agua. Por ello, apuntó que el consistorio estudia la redacción de un plan director que regule esta situación. El alcalde de Viacamp, Alfredo Pociello, apuntó que el congosto de Mont-rebei parece “la ciudad sin ley donde todo el mundo hace lo que le da la gana”, dijo. “Estamos condenados a encontrar una solución que pasa por la regulación”, dijo. Ambos alcaldes valoraron positivamente el flujo de visitantes aunque lamentaron que los ayuntamientos no tienen capacidad para regular los accesos y por ello instaron a la Generalitat y el Gobierno de Aragón a liderar esta limitación. La presidenta de la Noguera, Concepció Cañadell, alertó sobre la necesidad de preservar el espacio y pidió a los visitantes que tengan respeto por el entorno y las instalaciones. La presidenta de la Ribagorza aragonesa, Lourdes Pena, destacó la dificultad de encontrar una figura legal que ayude a regular el acceso al desfiladero y la navegabilidad. “Es necesario buscar una figura que solucione la situación que se vive en días punta en Mont-rebei”.