La construcción repunta de nuevo cerca de la estación de esquí de Baqueira tras años de parón

Naut Aran no alcanza aún los 1.800 vecinos empadronados, pero en temporada alta, esto es, durante la campaña de esquí, “multiplica la población por 10%”, según su actual alcalde, César Ruiz Canela. La dotación al municipio de servicios suficientes para cubrir las necesidades básicas (agua, calles o alumbrado público) es uno de los principales retos del ayuntamiento, que cubre sin problemas por los ingresos que le reporta el convenio con la mayor estación de esquí, Baqueira Beret.

El complejo ha invertido en los últimos años lo suficiente para asegurar la temporada blanca a pesar de que no nieve, no solo con la producción artificial de nieve sino con el traslado del manto blanco en camión e incluso en helicóptero. Mientras el esquí mueve el ocio y el turismo, la construcción, parada en los últimos años, ha comenzado a repuntar y el consistorio ha otorgado en el último año más licencias de obras para nuevas promociones que en los últimos diez. Se construye, según constata el ayuntamiento, en Bagergue, Gessa, Arties, Garòs y en Baqueira, donde se levanta una pleta de lujo. Buena parte de estas viviendas están ya apalabradas o vendidas, lo que da cuenta del renacimiento del sector. El consistorio trata de paliar el problema de acceso a la vivienda para jóvenes y trabajadores temporales con la cesión de terreno a la Generalitat para la promoción de viviendas de alquiler social. Los apartamentos de uso turístico proliferan también en Naut Aran, que defiende, pese a todo, que crean empleo en el sector de la limpieza del hogar o las lavanderías. La falta de plazas de residencia para la tercera edad preocupa también en el municipio, que ya proyecta una a medio plazo, mientras confía en que la de Les dé asistencia a Vielha y la de la capital sirva a los vecinos de Naut Aran.