INFRAESTRUCTURAS CARRETERAS
La Generalitat destinará 12 millones a evitar desprendimientos en sus carreteras en Lleida
También hará un seguimiento de las áreas donde aprecie un mayor riesgo para la circulación de vehículos
La Generalitat invertirá en los próximos cuatro años más de 12 millones de euros en trabajos de mantenimiento de taludes, terraplenes y puentes de la red viaria de su titularidad en Lleida, tanto en las comarcas del llano como del Pirineo, que suman más de 1.500 kilómetros de vías principales y secundarias. El objetivo es garantizar la seguridad vial y evitar desprendimiento de rocas y piedras en sobre las calzadas. Más de seis millones corresponderán a los contratos para puentes y estructuras, mientras que los otros seis millones son para los taludes y terraplenes, que han sido adjudicados a la unión de empresas UTE Actius Geotècnics Lleida.
En el conjunto de Catalunya, el departamento de Vicepresidencia, Polítiques Digitals y Territori destinará cerca de 60 millones de euros a estas obras durante los próximos cuatro años. Estas actuaciones, según informaron desde la conselleria, incluyen tanto el control y seguimiento de las carreteras como actuaciones concretas para estabilizar zonas con más riesgo geológico. “La prioridad de estos concursos es actuar en la conservación de estructuras y activos geotécnicos”, indicaron.
Apuntaron que actualmente en el conjunto de la red viaria del Govern hay más de 3.000 estructuras y 20.000 taludes susceptibles de sufrir aludes y desprendimientos que afecten a la circulación de vehículos. Se trata de incidencias de diversa entidad, que van desde pequeñas piedras y rocas en las calzadas a desprendimientos más graves que llegan a cortar la circulación en los principales ejes de comunicación. Añadieron que este tipo de contratos “más específicos” permiten actuar con más precisión que con los contratos genéricos de mantenimiento de carreteras que se han llevado a cabo hasta la actualidad, y permitirán incrementar el esfuerzo inversor.
En 2019, en las comarcas de Lleida se registraron al menos 120 desprendimientos de rocas y piedras sobre carreteras de la demarcación, y la mayoría de ellos en la Noguera y el Jussà, mientras que en el conjunto de Catalunya se contabilizaron 188, según los datos del departamento de Territorio. También ha habido otros desprendimientos a lo largo de los últimos dos años.
La caída de rocas ha afectado a los principales ejes viarios leridanos
Los principales ejes viarios de comunicación de las comarcas de Lleida, tanto del Estado como de la Generalitat, han sufrido en los últimos años incidentes ocasionados por la caída de piedras, desde la N-260 (Eix Pirinec) y la N-230 hasta la C-13, la C-28 y la C-14, entre otras.
En 2019 se contabilizaron 120 aludes, en gran parte por la DANA, que afectó gravemente las comarcas del llano, especialmente en la red secundaria de carreteras y accesos a pueblos. Una de las carreteras más afectadas fue la C-13 a su paso por Llavorsí, en plena campaña navideña cuando un desprendimiento de piedras cortó la calzada. En 2018 hubo 115a aludes, en un año récord de lluvia en Catalunya y 47 en las comarcas de Lleida, en vías de la Generalitat.
Ese año, dos personas fallecieron como consecuencia de un gran desprendimiento en la carretera de la Diputación entre los municipios de Sant Esteve de la Sarga y Castell de Mur. El gran volumen de afectaciones de 2019 se registraron a causa del temporal DANA, que afectó gravemente las comarcas del llano, especialmente en la red secundaria de carreteras y accesos a pueblos.