Arnau Farré, bronce mundialista

Arnau Farré ha vuelto. Después de casi cuatro años de calvario por culpa de las lesiones, el piloto de Vilanova de Segrià vuelve a sonreír después de colgarse este pasado fin de semana la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de Trial2, el mejor resultado de su carrera. El leridano se jugaba el último cajón del podio final en el último gran premio disputado en la localidad italiana de Ponte di Lengo, donde llegaba con un escaso margen de dos puntos sobre el británico Billy Green.

Pero Farré, sobre una Sherco, aguantó la presión y en las dos jornadas quedó por delane de su máximo rival, firmando dos cuartas posiciones que le aseguraron la medalla de bronce. El piloto del Moto Club Aitona ha sido muy regular, subiendo al podio en cinco de las diez pruebas disputadas, con tres terceros puestos, un segundo y la victoria que logró en el Gran Premio de Alemania. Al final ha totalizado 127 puntos, nueve más que Green, y a 20 de la segunda posición, que ha quedado en manos del asturiano Pablo Suárez, y a 31 del campeón, el noruego Sondre Haga.

“He hecho un campeonato muy regular, donde me he encontrado muy bien, tanto físicamente como sobre la moto”, explicó el leridano, que mejoró la cuarta posición que logró en 2016 y la octava del año pasado en el mismo campeonato. Este éxito llega cinco años después de su último podio internacional en 2017, cuando fue campeón de Europa, y tras superar una grave lesión de rodilla en 2018 que requirió de dos operaciones y que le dejó prácticamente inactivo casi tres años. De hecho, reconoce que “pensé en más de una ocasión abandonar la competición, porque perdí dos años.

En 2020 afronté la temporada pagándomelo todo de mi bolsillo, y tenía claro que si no me salía nada ara la siguiente, me retiraba. Por suerte surgió la opción de Scorpa y pude seguir”, explica. De cara a la próxima temporada, Arnau Farré repetirá en el Mundial de Trial2 con el objetivo de ganar el campeonato.

“Es el objetivo, aunque no será nada fácil”, asume.