TRIBUNALES
Nuevo conflicto en Tor: Condenan al heredero de El Palanca por amenazar al de Sansa por unos carteles
La jueza de Tremp le impone una multa de 900 euros. Ocurrió en agosto y, según la sentencia, dijo “a estos forasteros que vienen a decirnos lo que tenemos que hacer hay que pegarles una buena paliza”

Imagen de archivo de un cartel en el acceso a la montaña de Tor. - SEGRE
Nuevo capítulo judicial relacionado con Tor. El juzgado de Tremp ha condenado a Pablo Moreno, heredero de Jordi Riba Segalàs (Casa Palanca), por amenazar y coaccionar a J.M.A.M., heredero y sobrino de Josep Maria Montaner (Casa Sansa), según ha podido saber SEGRE. Concretamente, la jueza condena a Moreno como autor de los delitos leves de amenazas y coacciones al pago de una multa de 900 euros, a razón de 10 euros durante tres meses. J.M.A.M. ha sido representado por el abogado de Enric Rubio. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante la Audiencia de Lleida.
Los hechos tuvieron lugar los días 5 y 7 del pasado agosto y el heredero de Sansa denunció a Moreno en la comisaría de los Mossos d’Esquadra de Sort. Días después se celebró un juicio rápido en el juzgado de Tremp, que condenó al heredero de El Palanca.
En el fallo se considera probado que el 5 de agosto el sobrino de Montaner, su pareja y un operario se dirigían en dos vehículos hacia Tor con la finalidad de colgar unos carteles informativos “de conformidad con lo que había sido aprobado en la Junta de la Comunidad de Propietarios de la Montaña Particular de Tor celebrada en fecha 16 de febrero del 2025” y , al salir de la población de Alins, “fueron interceptados por Pablo Moreno, quien bajó de su vehículo”. Este se dirigió al operario diciéndole que parara el vehículo y que se diera la vuelta inmediatamente.
A continuación, el denunciante bajó de su coche y Pablo Moreno “se dirigió a él de forma agresiva y, para impedir que colgaran los carteles y le manifestó: ‘por mis cojones que en Tor no se hace nada sin mi permiso’, ‘tú, hijo de puta, qué piensas que vas a hacer en Tor”, “los Sansa sois unos hijos de puta” o “en Tor no se hace nada sin mi consentimiento”.
La jueza considera que “amedrentó” al denunciante, por lo que “por miedo” dieron media vuelta sin colgar los carteles. Dos días después, el heredero de Sansa y su esposa se encontraban desayunando en un bar de Alins cuando llegó Pablo Moreno, que se sentó en otra mesa con unos conocidos.
Poco después, según la sentencia, se incorporó y dijo: “A estos forasteros que vienen aquí a decirnos lo que tenemos que hacer, les deberíamos invitar a una buena comilona, después pegarles una buena paliza y echarlos de aquí a hostias”. En este sentido la jueza determina que Moreno se dirigía, aunque no directamente, al denunciante y a su esposa, “pues eran los únicos que se encontraban en el lugar, con ánimo de causarles miedo o temor de sufrir algún mal”.
En la vista, Pablo Moreno negó los hechos. Sobre el primer episodio, admitió que se produjo el encuentro en la carretera pero que en ningún momento tuvo una actitud agresiva o violenta. Sobre el incidente en el bar, “relata que efectivamente se encontraron desayunando, pero manifiesta que no dijo las expresiones denunciadas”. Su letrado pidió la absolución. Sin embargo, en ambos casos, la jueza llega a la conclusión que “entiendo Pablo Moreno profirió dichas expresiones con ánimo de causar temor” y le condena.