MOTOCICLISMO
Duro comunicado del Moto Club Segre tras el cierre del Circuito de Bellpuig: “hay responsables concretos”
El Moto Club Segre señala a la Catalana como responsable directa del cese de la actividad del Circuit de Bellpuig por orden de la Generalitat. Llevaba 36 años al frente de la gestión

Detalle del estado de deterioro del circuito en un tramo donde se honra la memoria de Josep Armengol, uno de los impulsores del trazado.
El cierre del Circuit de Motocross de Bellpuig, tras 36 años de actividad ininterrumpida, ha provocado que el Moto Club Segre, entidad que ha gestionado la instalación desde su inauguración en 1989, emitiera ayer un duro comunicado en el que señala directamente a la Federación Catalana de Motociclismo (FCM) como principal responsable de esta situación.
Según afirma el club leridano, el cierre “no es un accidente ni un hecho inevitable”, sino que tiene “responsables concretos”. En su comunicado, acusa a la FCM de actuar “de manera malintencionada y a espaldas del Moto Club Segre”, perjudicando así a todo el motociclismo catalán. Además, denuncia que la Federación aprobó retribuciones para su presidente “pagadas con el esfuerzo de los clubes y pilotos” mientras el circuito de referencia del motocross catalán se cerraba.
El anuncio oficial del cierre se produjo el pasado 12 de mayo a través de un breve comunicado en redes sociales. En él, el Moto Club Segre explicaba que el secretario general del Deporte, Abel Garcia, como máxima autoridad responsable del Circuit de Catalunya de motocross, comunicó oficialmente al club el 8 de mayo la clausura temporal de la instalación “hasta nuevo aviso”.
La Generalitat, propietaria del 75% de la empresa pública Circuit de Catalunya (el resto se reparte entre la Diputación con un 22% y el ayuntamiento de Bellpuig con un 3%), justifica esta decisión por la necesidad de adecuar el trazado a la legalidad vigente. Los convenios que mantenía con el ayuntamiento y el Moto Club Segre habían caducado en 2021, lo que hacía necesario un replanteamiento en el modelo de gestión, buscando un enfoque más profesional para la instalación.
El circuito de Montperler, inaugurado en 1989, ha sido gestionado por el Moto Club Segre desde sus inicios, organizando todas las competiciones celebradas en el recinto. Lluís Capdevila, presidente del club, expresaba ayer a SEGRE su profunda decepción y su enfado con la Federación Catalana: “En lugar de ayudarnos han dado malas referencias nuestras a la Generalitat. El cierre me sabe mal sobre todo por los pilotos y además el circuito está deteriorado al no haber ahora mantenimiento. En el trasfondo hay intereses como el hecho de que nosotros apoyáramos a otra candidatura en las elecciones a la Federación Española”, explicó Capdevila.
En su comunicado, el Moto Club Segre hace un llamamiento a todos los clubes y aficionados para no permanecer en silencio. “Callar es aceptar la injusticia. Hay que exigir responsabilidades y transparencia para abrir una nueva etapa que ponga por delante el deporte y sus practicantes”, señala. Advierte además que Bellpuig podría ser solo el primer paso de un deterioro generalizado si este modelo de gestión continúa, afectando a otros circuitos y clubes catalanes.
El texto concluye con un mensaje contundente: “No más excusas. O nos unimos ahora, o el motociclismo catalán continuará perdiendo futuro y oportunidades. Hasta aquí hemos llegado”.
Las dos pruebas del Campeonato de Catalunya, que el Moto Club Segre debía acoger en octubre y noviembre, las ha tenido que trasladar a Ponts. “Ni siquiera nos han dejado organizarlas antes del cierre”, lamentó Capdevila.