BALONMANO
Un Lleida mermado por las bajas cae en casa
El Córdoba aprovecha el desgaste de un equipo que se deshizo tras el descanso

Una jugadora del Lleida Handbol presionada por una rival del Córdoba. - AMADO FORROLLA
Un Lleida Handbol muy mermado por las bajas de Lara Peris, Carmen Esparza y Marina Graell cayó ayer ante el Rahi-Sepisu Córdoba, quinto clasificado, por un contundente 26-33. Las leridanas cerraron el 2025 con una derrota dolorosa que las deja en undécima posición después de encajar cuatro derrotas consecutivas.
En el partido, las visitantes empezaron mejor, estableciendo un parcial de 1-4 que demostraba su hambre ganadora. Aun así, las burdeos no se achicaron y levantaron el marcador en el ecuador del primer tiempo (9-8). La igualdad en el Onze de Setembre era máxima, pero el Córdoba aprovechó las pérdidas de las locales para, con un parcial de 1-4, poder marcharse al descanso por delante en el marcador (14-16).
En la reanudación, las de Iban Raigal intentaron seguir enganchadas al marcador, pero el desgaste físico por la escasa rotación las sentenció. Las visitantes lo aprovecharon y en el minuto 40 abrieron una ventaja de siete puntos (20-27) que mantuvieron hasta el final del encuentro (26-33).
Tras el partido, el técnico del Lleida Handbol, Iban Raigal, aseguró que “la gasolina no nos ha llegado y es normal. Hay jugadoras que están jugando sesenta minutos por partido”. También habló sobre el parón, destacando que “espero que puedan recuperar fuerzas porque habrá momentos duros”, concluyó.