El transporte hace subir un 2% los precios en Lleida respecto a 2016

El carro de la compra de los leridanos es un 2% más caro que en agosto de 2016, según los datos ofrecidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El responsable de esta subida ha sido principalmente el encarecimiento del precio del transporte. La subida de los precios en agosto de este año respecto a julio ha sido más moderada, y se ha quedado en el 0,3%, impulsada por el encarecimiento del ocio y la cultura y la hostelería.

Concretamente, en agosto, los precios del transporte han subido en Lleida un 4,4% respecto al mismo mes del año pasado. Este incremento viene impulsado por una subida paralela de los precios de los combustibles, un 3,2% más caros que en agosto de 2016.

La subida del precio del transporte viene impulsada por el encarecimiento del combustible

De Guindos insta a tener en cuenta la subida de precios en la negociación colectiva

Otra subida importante ha sido la del precio del ocio y la cultura, así como el de bares y restaurantes, un 2,9% y 2% más caros respectivamente que en el mismo mes de 2016.

Han sido precisamente estos sectores los que han impulsado la subida del 0,3% de los precios de agosto respecto a julio. Ir a un hotel o salir a comer o cenar fuera de casa les ha costado a los leridanos en agosto un 0,5% más que en julio, mientras que las actividades de ocio y cultura se han encarecido un 1,7%.

En el conjunto de Catalunya, los precios se han comportado de manera similar a Lleida, ya que la subida mensual e interanual fue la misma.

En el conjunto del Estado, la subida interanual ha sido del 1,6% en agosto, una tasa ligeramente menor a la catalana pero causada también por el encarecimiento del precio del transporte y de los combustibles. Con el dato de agosto confirmado, el IPC suma doce meses consecutivos en positivo y sigue, pese a este repunte de una décima en agosto, en una línea más moderada que a comienzos de año, cuando la inflación se disparó al 3 % interanual.

barcelona

Pimec recomendó ayer a las pymes que tengan en cuenta la realidad de la propia empresa y del sector para determinar sus precios y salarios, informó la patronal en un comunicado. Tras conocerse que la inflación interanual en Catalunya sube una décima en agosto hasta el 2%, la patronal catalana hizo una lectura positiva de este dato y recordó que los incrementos salariales deben ir acompañados de mejoras de la productividad. También pidió al Gobierno central que realice una “verdadera reforma del sector eléctrico” y reiteró la necesidad de hacer una seria apuesta por el autoconsumo y las energías renovables.

En cambio, los sindicatos UGT y CCOO de Catalunya insistieron en la necesidad de aumentar los salarios, entre el 1,8% y el 3%, para compensar la subida de precios y la pérdida de poder adquisitivo acumulado durante la crisis.

UGT resaltó que, una vez más, en Catalunya los precios crecen más que en el resto de España, lo que supone que el poder adquisitivo de los catalanes se reduce en mayor medida, y consideró que unos niveles salariales “de dignidad” garantizan la capacidad de gasto de las familias y un aumento de la demanda interna, a su vez generadora de empleo y nuevos ingresos en los hogares.

CCOO calculó que la pérdida media acumulada de poder adquisitivo en Catalunya ha sido del 5,9% entre 2012 y 2016, y alertó de que este año está siendo un año de recuperación de beneficios empresariales pero también de más empobrecimiento de los trabajadores, ya que los salarios siguen cayendo. Afirmaron que los costes salariales disminuyeron un 0,2% en el primer trimestre, mientras la inflación se mantiene al alza.

El ministro de Economía, Luis de Guindos, auguró que el IPC se acercará en los próximos meses al límite del 1%, y afirmó que el entorno de moderación en la evolución de los precios tiene que ser “tenido en cuenta” en la negociación colectiva.