BANCA
Josep Oliu espera que los accionistas ‘entierren’ la opa
El consejo del Banco Sabadell rechaza de forma unánime la operación. Destaca la revalorización de las acciones

César González-Bueno y Josep Oliu, ayer tras el consejo. - EUROPA PRESS
El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, valoró ayer que la oferta pública de adquisición (opa) del BBVA ha pasado de ser neutra a una oferta altamente gravosa para los accionistas residentes en España: “De esta oferta concreta de opa, que nació muerta, ya solo queda una cosa, y es que la entierren los accionistas”. Lo dijo ayer en rueda de prensa junto al consejero delegado, César González-Bueno, y el director financiero, Sergio Palavecino, después de que el consejo de administraciónn recomendara a sus accionistas rechazar la oferta de BBVA. Según él, un accionista de Banco Sabadell que en noviembre de 2020 tenía 10.000 euros invertidos en la entidad catalana, ahora tiene 112.000, lo que representa una cifra 11 veces mayor que hace 5 años, y más del doble desde abril de 2024.
El consejo rechazó por unanimidad la opa de BBVA al considerar la oferta “insuficiente”, por lo que recomienda a sus accionistas no aceptarla. En un documento remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores afirma que la opa “hostil” incluye una oferta que “no recoge adecuadamente el valor intrínseco de las acciones del banco”, “infravalorando muy significativamente” el proyecto del Sabadell y sus perspectivas de generación de rendimientos para el accionista en solitario.
En este contexto, César González-Bueno defendió que una segunda opa obligatoria de BBVA “con probabilidad” sería a un precio mayor que el actualmente ofertado. Dijo que, en caso de que BBVA renuncie al umbral mínimo de aceptación del 50% quedándose con una participación del 30% al 50%, el banco deberá lanzar una opa en efectivo, o con alternativa en efectivo, por el total de los derechos de voto que no controle.
Dividendo por TSB
BBVA, por su parte, afirmó que acudir al canje de acciones propuesto opa no supone perder el dividendo que el banco catalán tiene previsto distribuir como consecuencia de la venta de TSB, al estar “inmerso en el valor”.