SUCESOS EMERGENCIAS
Explota un patinete eléctrico en un domicilio de la calle Templers
Se estaba cargando y causó daños en una habitación || Los Bomberos aconsejan no instalar baterías de baja calidad ni modificarlas y cargarlas en lugares adecuados
Estado en el que quedó el patinete tras explotar la batería.
Un patinete eléctrico explotó ayer al mediodía y causó un incendio en un piso de la calle Templers. Los servicios de emergencia fueron alertados a las 11.30 horas y hasta el lugar acudieron cinco dotaciones de los Bomberos de la Generalitat, patrullas de la Guardia Urbana y los Mossos d’Esquadra y el SEM. El vehículo de movilidad personal (VMP) explotó cuando se estaba cargando en un piso de la primera planta del número 13.
Los propios inquilinos pudieron apagar el fuego con un extintor. La explosión destrozó el patinete y también causó daños en la habitación. Los Bomberos ventilaron el edificio ya que también afectó al establecimiento comercial que hay en la planta baja.
Durante el operativo, la calle estuvo cortada al tráfico. No es el primer incendio de patiente en la capital del Segrià. En mayo de 2020, una persona resultó intoxicada por inhalación de humo después de que ardiera un patinete eléctrico en un piso de Passeig de Ronda.
Los vecinos se tuvieron que confinar. Lluís Mendo, responsable de Salvamento de Tráfico y Asistencias Técnicas de la División de Operaciones de Bomberos de la Generalitat, explicó ayer a este periódico que “hay que tener mucho cuidado con los patinetes. Por ejemplo, recomendamos que no se adquieran baterías de baja calidad, que no se hagan modificaciones y hacer un mantenimiento adecuado”.
Mendo también aseguró que “lo ideal es cargarlo en un espacio abierto pero, si no puede ser así, en un habitación cerrada y que cerca no haya cortinas u otro material inflamable”. Otros consejos son no exceder el tiempo de carga e instalar un detector de humos. Cabe recordar que el 1 de febrero entró en vigor la prohibición durante seis meses de entrar en el transporte público con patinetes y monociclos eléctricos.
El acceso de vehículos de movilidad personal (VMP) no está permitido en los autobuses urbanos e interurbanos, así como en las instalaciones de todos los servicios de Ferrocarrils, Rodalies y trenes regionales de Catalunya. Quedan excluidos de esta norma los trenes de alta velocidad operados por Renfe: el AVE y Avant. El incumplimiento de la normativa comporta una multa de 200 euros.
