Directores de centros de Lleida abogan por leer y calcular a diario y escribir más a mano

Directores de centros educativos de Lleida proponen fomentar que los alumnos escriban de forma manual para mejorar la grafía y la ortografía, así como leer y calcular a diario. Son algunas de las medidas que plantean en un documento remitido al grupo de expertos creado por el Govern para mejorar el nivel del sistema educativo catalán.

Más escritura a mano para mejorar la grafía y reducir las faltas, y lectura y cálculo a diario en Primaria y la ESO. Estas son algunas de las propuestas que los directores de centros educativos agrupados en la Associació de Directius d’Educació de les Terres de Lleida han enviado al grupo de 18 expertos (uno leridano), creado por el Govern a raíz de los desastrosos resultados del informe PISA. La entidad congrega a directores de colegios de Primaria, institutos de Secundaria, Zonas Escolares Rurales, Escuelas Oficiales de Idiomas y centros de formación de adultos. Los expertos se reunieron por primera vez el 10 de enero para comenzar a concretar medidas para mejorar los resultados educativos de comprensión lectora y matemáticas y que se puedan comenzar a aplicar ya el próximo curso.

Los directores argumentan la necesidad de la escritura a mano “porque los alumnos tienen una mala grafía y las faltas de ortografía aumentan en la ESO” y apuestan por programar “comprensión oral, escrita y lectora diaria” y por mejorar la formación lingüística de los docentes. Inciden en la necesidad de aplicar “el cálculo mental y la resolución de problemas a diario” de forma escrita o bien oral y en la formación STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas) de los docentes para aplicarlo en el aula. Para Secundaria en general, plantean retornar a las notas numéricas, favorecer la FP básica “para los alumnos que a los 14 años ya demuestran que necesitan unos estudios más profesionalizadores” y rebajar las ratios para una atención más próxima al alumnado con 20 alumnos por clase como cifra óptima y 24 como máxima (ahora es de 30). De hecho, sugieren una disminución paulatina de la ratio en general. Para la etapa postobligatoria, abogan por una FP alineada con la demanda laboral del territorio, regular la distinción de itinerarios en cuarto de ESO, revisar currículums de Bachillerato “para ver si es necesario que los alumnos cursen tantas optativas o es mejor volver a las horas de materias de modalidad de antes de la LOMLOE para que puedan preparar bien los estudios”.El documento también incluye que todos los centros dispongan de profesionales en salud o atención social, por ejemplo, “para tareas especiales que ahora recaen en los profesores”, así como más especialistas en lengua, interculturalidad y cohesión social “ para la escolarización de alumnado recién llegado y que no sabe leer ni escribir”. Plantea, además, un impulso al reconocimiento de la tarea docente, un aumento de la plantilla para poder hacer efectiva la codocencia, más apoyo para desplegar el plan de inclusión y más horas de orientación psicopedagógica en todos los centros para mejorar la detección y seguimiento de alumnos con necesidades especiales.

Apuestan por extender a Primaria la jornada intensiva

El documento que la Associació de Directius d’Educació de les Terres de Lleida ha remitido a la comisión de expertos incluye un planteamiento más laboral. Es el de “extender la jornada continuada a la Primaria y, por tanto, también eliminar la sexta hora sobre todo en centros de máxima complejidad”. Actualmente, en Primaria la jornada es partida y el horario de los centros con un elevado porcentaje de alumnos vulnerables consta de una hora más. Los directores también especifican la necesidad de “no retornar a la jornada partida” en Secundaria, así como de disponer de un “documento clarificador” del currículum de Primaria y Secundaria.

Los alumnos instan a rebajar las ratios o desdoblar grupos

Los alumnos participantes en la reunión solicitaron rebajar las ratios en Secundaria a 20 alumnos por grupo o bien que haya dos docentes para atender la diversidad, dar más oportunidades a los alumnos conflictivos, que haya una mayor coordinación entre los centros de Primaria y Secundaria, que los profesores impartan clases de forma dinámica y que los exámenes solo sean una parte de la nota. Otra de sus reivindicaciones es que la selectividad sea igual en todas las comunidades autonómicas, para evitar que los alumnos de alguna tengan ventaja para entrar en la universidad al ser más fácil, y defendieron el uso de las nuevas tecnologías, aunque con moderación.