El Govern ve "imprescindibles" 500 nuevos mossos y pide a Hacienda rectificar

El conseller de Interior, Jordi Jané, ha considerado este viernes "imprescindible" la convocatoria de 500 nuevas plazas en el cuerpo de los Mossos d'Esquadra para poder garantizar la seguridad en Catalunya y ha exigido a Hacienda que "rectifique" su requerimiento para limitar esa convocatoria. El Ministerio de Hacienda ha remitido un requerimiento a la Generalitat advirtiendo de que solo puede ofertar 50 nuevas plazas en los Mossos d'Esquadra, atendiendo a la tasa de reposición.

"Exijo que se nos deje convocar estas 500 nuevas plazas. Por razones de seguridad, no podemos dejar de hacer esta convocatoria", ha recalcado Jané, tras participar en un minuto de silencio en el Palau de la Generalitat en memoria de las víctimas del atentado de Hipercor.

Jané ha evitado afirmar que hará caso omiso del requerimiento, ya que confía en poder convencer al Gobierno del Estado, con argumentos jurídicos y exponiendo las necesidades en términos de seguridad, si bien ha advertido: "No permitiré que nada deteriore la seguridad de Catalunya". Ahora mismo, su conselleria está "estudiando jurídicamente este requerimiento para poder dar la respuesta adecuada", ha dicho.

Para Jané, esta necesidad de más efectivos policiales "no es un tema opinable, es un tema objetivo, y lo avalan los datos", así que el requerimiento le ha causado "sorpresa".

El conseller ha recordado que el 17 de septiembre de 2006, el Estado y la Generalitat fijaron como "horizonte" alcanzar una dotación total de 18.267 agentes de los Mossos, pero sólo se ha llegado a superar ligeramente la cifra de 17.000.

Ahora mismo, y después de seis años sin ninguna convocatoria de plazas, hay 16.783 agentes de los Mossos, por lo que "es necesario, primordial y urgente" convocar estas 500 nuevas plazas.

Para ilustrar esas necesidades de nuevos efectivos, ha comentado que el año pasado los agentes del cuerpo de Mossos d'Esquadra acumularon 440.000 horas extras. Jané "quiere pensar" que el requerimiento "no es un castigo político" al Govern por el proceso soberanista, porque en temas de seguridad ambas administraciones deben ser capaces de ponerse "de acuerdo siempre" y "sería imperdonable" que no lo hicieran.