MONARQUÍA CORRUPCIÓN
Juan Carlos I conocía la investigación antes de regularizar sus cuentas
Habría recibido tres notificaciones de la Fiscalía en relación a las diligencias abiertas sobre su fortuna || Podría comportar que no se librara de un supuesto delito fiscal
Juan Carlos I permanece en los Emiratos Árabes Unidos debido a las sospechas sobre su fortuna.
La Fiscalía del Tribunal Supremo notificó a Juan Carlos I hasta en tres ocasiones que estaba siendo objeto de una investigación en relación al origen de su fortuna personal, antes de que el rey emérito regularizara su situación con Hacienda, según adelantó ayer El País. En caso de confirmarse, el padre de Felipe VI no se libraría de una causa en su contra por presunto delito fiscal pese a haber intentado solventar sus incumplimientos con el fisco.
Así, según fuentes cercanas al asunto citadas por el rotativo madrileño, el Ministerio Público dio contó al emérito en junio, en noviembre y en diciembre de 2020 de la apertura de diligencias relativas a su fortuna.
En estas notificaciones, le invitó a personarse en las causas. Dado que dos de las notificaciones tuvieron lugar en junio y noviembre, se habrían producido antes del momento en que Juan Carlos I presentó una regularización fiscal voluntaria ante la autoridad tributaria en la que abonó un total de 678.393,72 euros por lo dejado de pagar en impuestos correspondientes a los ejercicios 2016, 2017, 2018.
Tras esta primera regularización, se produjo una segunda, conocida en febrero de este año, por rentas no declaradas durante varios ejercicios que suman más de ocho millones de euros de pagos en especie, y por medio de la que el que fuera jefe del Estado entre 1975 y 2014 abonó más de cuatro millones a la Agencia Tributaria..
La importancia de estas notificaciones previas a las regularizaciones deriva de lo señalado en el Código Penal, que dice que se considerará regularizada la situación tributaria cuando se haya procedido al completo reconocimiento y pago de la deuda, “antes de que el fiscal, el Abogado del Estado o el representante procesal de la Administración que se trate” interponga una querella o dé a conocer al investigado de la causa en su contra.
Como aún no se ha presentado querella contra el emérito, quien permanece en los Emiratos Árabes Unidos desde hace más de un año, la cuestión estriba en el momento de las notificaciones y de las regularizaciones. Es un extremo que deberá valorar la Fiscalía para dar por buena o no la regularización a efectos de anular el presunto delito fiscal.
