El gobierno español niega "dificultades" de suministro de gas

La vicepresidenta tercera del gobierno español, Teresa Ribera, ha afirmado este jueves que su ejecutivo "lamenta" la decisión de Argelia de suspender el tratado de amistad y vecindad firmada por los dos países en 2002, y espera "recuperar esta relación tan pronto como sea posible". "Confío en que con el tiempo, y buscando puntos de encuentro, podamos superar esta situación", ha asegurado. Poco después, el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, ha negado que tengan información que indique "alguna dificultad" para acceder al gas argelino. Sin embargo, Albares ha explicado que el gobierno español está analizando "el alcance de las consecuencias prácticas" de la decisión de Argelia para "adecuar la respuesta" de España a sus "intereses".

En una atención a los medios después de un discurso sobre la cumbre de la OTAN en Madrid, Albares ha remarcado que serán "constructivos" para tener "las mejores relaciones con Argelia", pero ha avisado de que serán "firmes" a la hora de defender "los intereses de España".

La suspensión del tratado de amistad por parte de Argelia implica que este país congela las cuentas bancarias relacionadas con el comercio exterior de productos y servicios con España. El gobierno argelino ya ha emitido una orden en esta dirección que no especifica si la suspensión afecta o no a los productos energéticos.

En una entrevista en Onda Cero, Ribera se ha mostrado "confiada" que la relación comercial entre los dos países con respecto al gas seguirá funcionando como hasta ahora. Ha recordado la existencia de contratos en vigor entre la compañía argelina Sonatrach y las empresas españolas.

Todo en paralelo a la publicación este jueves en el Boletín Oficial del Estado del orden ministerial que recoge el tope del precio del gas para rebajar el coste de la electricidad una vez obtenido el visto bueno definitivo de la Comisión Europea. Tendrá aplicación a sufrir del próximo martes, 14.