Manel Ezquerra: «Mi hijo dice que el mundo rural no interesa para rapear»

Cuando uno busca en internet “Manel Ezquerra” y “Alcarràs” lo primero que sale no es usted sino un rapero que se llama como usted. ¿Tiene en casa una voz del mundo rural?

El rapero es mi hijo. Estudió en la escuela agraria e iba a ser mi relevo. Cuando su canción se hizo viral seguía trabajando, ya llevaba más de un año. Es curioso, pero una vez le propuse que hiciera alguna canción de defensa del mundo rural y me dijo que eso no le interesa a nadie. Hace canciones de amor y desamor.

He estado unos años fuera, ¿cómo ha cambiado Lleida?

La capital ha crecido. Ya no es tan agraria, aunque sigue estando muy vinculada a esa actividad.

¿Usted se dedica al campo?

Sí, soy avicultor. Crío codornices, perdices y picantones. Como en la fruta, tuvimos que crecer a base de créditos para acabar cobrando lo mismo por cada codorniz, cuando en la tienda están al doble.

¿Dan más picotazos en la granja o en la política?

En la política siempre pasan cosas, y los que estamos en ella tenemos que aguantar de todo, pero no nuestros entornos. No nos hemos metido en política para eso. Es lamentable que haya esos casos de lawfare. Con el adversario político tienes que intentar entenderte, pero algunos partidos optan por una estrategia de acoso y derribo, de fake news y de todo vale.

Usted en los últimos años ha tenido algunos líos ¿Cómo ha acabado eso?

Detrás de todo eso estaba mi exsocio de gobierno (Junts). Cuando hicimos el relevo en la alcaldía noté enseguida que tenía ansias de protagonismo. Para entonces ya llevaba tiempo sufriendo escraches por gente afín a ellos que nunca denuncié; hasta el día de los hechos, cuando pasé de víctima a denunciado. Todo eso se ha archivado, en el ayuntamiento, en la Fiscalía y en el juzgado, aunque han recurrido.