El rendimiento del maíz cae y los costes se disparan más de un 35%

Las condiciones meteorológicas de esta primavera y verano están pasando una enorme factura al sector agrícola de Lleida. En el caso de la fruta, las heladas y el pedrisco han arruinado buena parte de la producción, y en el caso del maíz, semanas de calor extremo se han traducido en una caída del rendimiento por hectárea. El responsable del sector de herbáceos de Unió de Pagesos, Santi Caudevila, explica que la media de producción ronda los 16.000 kilos de maíz por hectárea y este año se prevén entre mil y dos mil menos, con un promedio de 14.000.

Pero los agricultores se enfrentan, además, a unos costes disparados. Caudevila habla de encarecimientos de un 35% en fitosaniatrios y semillas, mientras que en el caso de abonos son muy superiores. Además, están siendo también víctimas de los precios energéticos estratorféricos, con el gas, la electricidad y el gasóleo agrícola.

En esta línea, apunta incrementos superiores al 45% en el secado del maíz. Según sus datos, el año pasado costaba 15 euros el proceso de secado de un maíz con una humedad del 22%. Este año, el desembolso es de 22 euros.

Los precios de este cereal en el mercado se encuentran también muy por encima del año pasado, pero Unió de Pagesos advierte que no compensa al agricultor que tiene que afrontar unos gastos que califica de desorbitados. Por ejemplo, la última tablilla de Mercolleida valora en 349 euros la tonelada de maíz nacional disponible sobre secadero en Lleida, frente a los 352 de la semana anterior. En el caso del maíz de importación para el período de octubre a diciembre, son 328 euros, dos menos.

El año pasado, los precios eran de 255 y 272 euros por tonelada, respectivamente en las mismas fechas. Pese al aumento, Caudevila alerta que los costes ponen a los agricultores en una situación difícil, “esos dos mil kilos que faltan por hectárea sobre una campaña normal son cruciales para los resultados”.La cosecha del maíz se ha comenzado estos días en algunas fincas de Lleida, con un adelanto promedio de unos quince días por efecto de las condiciones meteorológicas de la campaña, fundamentalmente por el calor.

Más hectáreas de segundas cosechas con el agua sin asegurar

Unió de Pagesos destaca que ha crecido el interés por parte de los agricultores de hacer una segunda cosecha de maíz y se enfrentan en estos momentos a dos problemas: unas temperaturas inusualmente altas para la época y todos los canales prorrateando el agua por la sequía.

“Si los canales llegan a cortar en suministro, no habrá segunda cosecha”, alerta Santi Caudevila. Explica que este año las segundas cosechas se han ampliado a fincas en las que no eran habituales, como es el caso del Urgell. Los agricultores buscan con ello incrementar los resultados después de haber hecho una primera cosecha de cereal, como puede ser la cebada.

Los datos oficiales de la conselleria de Agricultura sitúan en 25.000 las hectáreas destinadas ahora al cultivo del maíz en Lleida, frente a 31.459 el año pasado. Caudevila apunta que en estos datos no se incluyen las segundas cosechas.