Las pistas garantizan la práctica del esquí pese a las altas temperaturas del puente

Las altas temperaturas de estos días debido a la inversión térmica con temperaturas de hasta 8 grados de mínima en las cumbres de las pistas están obligando a Baqueira a dispersar la nieve caída en noviembre. No obstante, la estación ha conseguido duplicar los kilómetros esquiables gracias a esta maniobra y ha pasado de los 15 de primeros de semana a los más de 34 habilitados para el puente festivo, lo que garantiza la práctica del deporte blanco. El complejo invernal con mejores espesores (entre 20 y 80 centímetros) es Boí-Taüll, que tiene casi el 80% de sus instalaciones abiertas. Por su parte, las estaciones del Sobirà, Port Ainé y Espot, tienen entre 20 y 50 centímetros de nieve, suficientes para resistir en buenas condiciones todo este largo fin de semana. Tavascan permanece cerrada por falta de nieve y a la espera de precipitaciones solo está abierta para usos turísticos tanto la zona de alpino como la de nórdico. Responsables de los complejos de Ferrocarrils de la Generalitat (Espot y Port Ainé) indicaron que se está a la espera a partir del lunes de que bajen los termómetros para poner en marcha los cañones, al igual que el resto de las pistas.

Por lo que respecta a las pistas de fondo, solo Tuixent-La Vansa está abierta mientras que al resto se puede acceder para hacer raquetas. El buen tiempo previsto para todo el puente animó la afluencia de esquiadores en todos las pistas.