Un municipio de Lleida prohíbe regar jardines y llenar piscinas ante la situación de escasez de agua por la sequía

El Ayuntamiento de Bellver de Cerdanya prohíbe desde esta semana regar jardines, llenar piscinas o llevar a cabo cualquier otra actividad de este tipo haciendo uso de la red municipal de suministro de agua potable.

El motivo son las bajas reservas que hay en los diversos depósitos que abastecen los diversos núcleos de la población, que han descendido considerablemente en los últimos 15 días. De hecho, el más importante llegó al 30% de su capacidad y se constató que el volumen de agua que entraba proveniente de los acuíferos era menor en lo que salía.

Ahora, la situación se empieza a revertir gracias a los efectos del llamamiento hecho desde el consistorio, que también ha pedido a los vecinos que limiten el consumo todo el que puedan.