El ascenso, una utopía

Salvo que un milagro no lo evite, algo poco probable teniendo en cuenta que el Esparreguera ha sido el campeón invicto del grupo de Copa Catalunya, el Club Bàsquet Alpicat deberá esperar para subir a la Liga EBA. Los hombres que dirige Joan Isart apenas tuvieron opción y perdieron por 28 puntos de diferencia (67-95) ante un Esparreguera que ahogó a los leridanos en defensa y sentenciaron con un gran acierto desde la línea de 6,75.

El partido ya comenzó mal para los intereses leridanos, ya que un parcial de 4-11 en los primeros cinco minutos puso en clara ventaja a los barceloneses, que también estuvieron arropados en las gradas del Parc del Graó. El Alpicat aguantó el tipo durante el primer cuarto, que cayó del lado visitante por diez puntos (13-23), pero en el segundo el duelo, y prácticamente la eliminatoria, quedó visto para sentencia después de un estratosférico parcial de 6-22 del Esparreguera, que elevaba la ventaja hasta los 26 puntos.

La remontada era prácticamente una misión imposible, pero había que competir. A los leridanos no les salía nada en ataque, ahogados por la intensidad defensiva del Esparreguera, por dejó constancia de por qué es la mejor defensa de la categoría. Los jugadores clave del Alpicat apenas aparecieron, especialmente Stankevits, que fue anulado por completo. Solo el trío formado por Planella, Vallverdú y Solsona –anotaron 45 de los 67 puntos de su equipo– aguantó el tipo, especialmente en el último cuarto, en el que las diferencias alcanzaron los 31 puntos de desventaja.

El Alpicat afrontará el próximo domingo el partido de vuelta en la pista del Esparreguera con el objetivo de competir e intentar ganar el partido.