Arranca un Borges renovado

La plantilla del FC Borges inició ayer los entrenamientos para preparar su segunda aventura consecutiva en la Primera Catalana, después de que en su regreso a la categoría consiguiera de forma holgada la permanencia. El equipo presenta muchas novedades, la principal en su banquillo con la llegada de Manel Cazorla, que procede del juvenil del Nàstic y que sustituye la marcha de Joan Roca al final de la pasada campaña por voluntad propia. El técnico indicó sobre su nuevo reto que pretende que “el aficionado disfrute del juego del equipo y tratar de conseguir los puntos que te garanticen la permanencia lo más pronto posible.

A partir de ahí no renunciaremos a nada”. Bajo sus órdenes tendrá a una plantilla que mantiene la columna vertebral de la pasada temporada, reforzada con siete caras nuevas: los defensas Llobet (Amposta), Fabregat (Alpicat) y Ñoño (L’Hospitalet), los centrocampistas Nicolau (Pobla Mafumet B) y Dimitriev (Reus Deportiu B), y los delanteros Torondel (Pobla Mafumet B) y Doblas (CF Igualada).

Entre los cambios destaca la retirada del capitán del equipo, Arnau Setó, que cuelga las botas a los 30 años después de que una lesión le privara de jugar la segunda vuelta la temporada pasada. Arnau, con catorce campañas en el primer equipo del Borges, donde se inició a los 16 años, ha disputado 411 partidos oficiales y ha marcado 148 goles. El ya excapitán no se desvincula del mundo del fútbol, ya que continuará ligado, ahora como entrenador del cadete de División de Honor del Atlètic Segre.