Clamor por la paz en Lleida

Cientos de alumnos de las comarcas leridanas se sumaron ayer a la celebración del Día Escolar de la No Violencia y la Paz, que tiene lugar cada 30 de enero coincidiendo con el aniversario de la muerte del líder pacifista Mahatma Gandhi. En Lleida ciudad, estudiantes de los institutos Sant Jaume Les Heures, Episcopal, Sant Josep de Calassanç y Maristes Montserrat se congregaron la mañana de ayer en la plaza Ricard Viñes para reivindicar los derechos de los menores inmigrantes sin referentes familiares. Según Pilar Sierra, coordinadora pedagógica del colegio Les Heures y presidenta de la asociación Lleida Pels Refugiats, el acto tuvo como objetivo denunciar “el racismo y la discriminación” que ha generado la llegada de estos menores extranjeros no acompañados. “A estos adolescentes, que han sufrido mucho para llegar hasta aquí, se les ha criminalizado y etiquetado. Tenemos que preparar a los futuros adultos para que sean capaces de crear un mundo mejor, más justo”, explicó Sierra. Durante el acto, Mustafá, un joven de 17 años del centro de acogida Mandoni, leyó un manifiesto en el que pidió más tolerancia. “La ciudad de Lleida siempre nos ha tratado con mucho respeto, pero hay algunos que piensan que somos diferentes por nuestra religión, nuestro idioma o nuestra cultura”, explicó Mustafá, mientras añadió que “las diferencias no justifican el daño y los prejuicios. Todos somos iguales, personas del mundo. También tenemos familia, aspiramos a conseguir un buen trabajo y queremos un futuro mejor”. Tras una performance del grupo de teatro de la escuela Sant Jaume Les Heures con la que animaron a reflexionar sobre la situación de exclusión social y la criminalización de estos adolescentes emigrantes, todos los asistentes compartieron mensajes de apoyo en un ‘muro de las soluciones’ y colgaron pancartas en las que reivindicaban “juntos construimos” y “mena no quiere decir menor no aceptado”.

“No debemos criminalizar o juzgar a una persona sin conocerla” “Mucha gente criminaliza a estos adolescentes por venir de otro país, pero queremos compartir un mensaje a favor de la inclusión. No puedes jugar a una persona sin conocerla”. Así se expresaron ayer Icra Martínez y Júlia Prenafeta, alumnas de cuarto de la Eso del instituto Sant Jaume Les Heures que participaron en la organización del acto en la plaza Ricard Viñes y que aseguraron que “se habla muy poco de las dificultades que han tenido que pasar para llegar aquí en busca de un futuro prospero”, aseguraron las jóvenes. “No tenemos que pensar que lo diferente siempre es malo, tenemos que dar una oportunidad a las personas que nos rodean, sin etiquetarlas”, apuntaron Júlia e Icra, que en los últimos meses “hemos participado en talleres en el aula para conocer más este tema y aprender a ser más tolerantes”.