CRÍTICADECINE
Bayona y los dinosaurios
El cine de aventuras siempre se ha guardado en la retina como un tesoro del que no se puede prescindir, pues ha llenado vacíos enormes, ha desarrollado la imaginación y nos hizo amigos de exploradores y héroes de todo tipo a los que hemos acompañado por los cinco continentes, en selvas o barcos pirata, por desiertos y ciudades míticas. Hoy día, la aventura es un espectáculo más visual que emocional, ha perdido alma pero ha ganado en tecnología y sus métodos son abrumadores. Sobre este nuevo Jurassic World, permítanme decir a riesgo de malas interpretaciones, si hubiésemos sido tan condescendientes con otro director, uno no sabe. Pero lo cierto es que el pulso de esta película lo ha puesto Bayona metido en una producción gigantesca, tanto como algunas de las criaturas que pueblan esta quinta entrega, y que sale airoso del desafío, incluso impregna la película con disquisiciones morales y sabe en qué momento debe tocar la fibra sensible con una sola escena que deja a todos acongojados. Cierto es que las sagas se desgastan, y tanta vuelta de tuerca se hace cada vez más burda, pero lo que salva este Jurassic World: El reino caído -que tampoco es el conjunto actoral- es esa inyección de ruido y furia desde la erupción volcánica en la isla Nublar, hasta el desmadre total en una gran mansión donde chocan los instintos ecologistas de los buenos y el alma negra de los malos, que son como siempre mucho más perversos y maliciosos que cualquier bicho antediluviano reinventado enjaulado, o pululando por los pasillos ansioso de ser libre en el mundo actual. Y es que Bayona es muy capaz de llegar hasta donde se proponga, o mejor sería decir que ha llegado.
JURASSIC WORLD:... Dirección: J. A. Bayona. Intérpretes: Chris Pratt, Bryce Dallas Howard. Cines: JCA Alpicat, Urgellenc (Tàrrega, Solsona). ★★★☆☆