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Cámaras de vigilancia apagadas en 2 pueblos al no tener permisos y otros dos renuncian

Torre-serona y La Portella las instalaron hace meses para evitar que foráneos desborden de basura sus contenedores y prevenir actos incívicos || Almenar y Aitona desisten de hacerlo por “trabas” del Govern

Cámaras de vigilancia apagadas en 2 pueblos al no tener permisos y otros dos renuncian

Cámaras de vigilancia apagadas en 2 pueblos al no tener permisos y otros dos renuncianA.T.S.

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Las cámaras de videovigilancia de dos pueblos del Segrià están apagadas desde que las instalaron hace meses. Los ayuntamientos de Torre-serona y La Portella las colocaron para evitar que foráneos desborden sus contenedores de basura y prevenir actos incívicos. Sin embargo, aún no han podido ponerlas en marcha al no recibir los permisos de la Generalitat, algo que es motivo de quejas de los alcaldes.

Al constatar las complicaciones para autorizar equipos de vigilancia, otros consistorios como los de Almenar y Aitona han renunciado a instalarlos. El alcalde de Torre-serona, Agustí Jiménez, explicó que el ayuntamiento invirtió cerca de 4.000 euros en 4 cámaras para vigilar islas de contenedores de basura, donde depositan sus desechos personas de pueblos próximos con recogida puerta a puerta. Añadió que no las pueden poner en marcha porque no han superado los trámites que exige la conselleria de Interior.

“La normativa de la Generalitat ha cambiado y es mucho más restrictiva en cuanto a privacidad de las imágenes, sobre todo en municipios de menos de 3.000 habitantes sin policía local, en los que la revisión de grabaciones corresponde a los Mossos”. Añadió que, en poblaciones con Guarida Urbana, poner cámaras en la via pública “no supone dificultades”. En la misma línea se expresó el alcalde de La Portella, Carles Català, quien indicó que “tenemos cámaras instaladas que no sirven para nada”.

“Es verdad que tienen algún efecto disuasorio, pero poco más”, puntualizó. El consistorio de La Portella las colocó para evitar actos vándalicos en edificios y espacios públicas. “Si optamos por esta medida es porque existe una problemática que queremos solucionar”, remarcó el primer edil.Por su parte, otros ayuntamientos han desistido de colocar cámaras en la vía publica para evitar el “turismo de basura” o gamberradas al constatar la dificultad que supone ponerlas en funcionamiento.

Es el caso de Aitona y Almenar. “Queríamos colocarlas a la entrada y salida del pueblo pero, tras varios estudios, vimos que hacía falta una inversión muy importante sin tener la certeza de poder usarlas, por lo que acabamos descartándolo”, explicó la alcaldesa de Aitona, Rosa Pujol. La primera edil de Almenar, Teresa Malla, señaló que también estaba previsto en su pueblo pero “se nos avisó de que no podriamos utilizarlas en varios años”.

Videovigilancia contra el “turismo de basura”

Una de las cuatro cámaras de videovigilancia que ha colocado el ayuntamiento de Torre-serona para controlar las islas de contenedores y evitar que acaben desbordados por desechos que tiran personas de pueblos vecinos, en los que se lleva a cabo la recogida puerta a puerta.

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